El teatro Tomás Salas de Álora ha acogido este sábado la celebración del Día de la Provincia, una jornada marcada por la entrega de Medallas de Oro de la Provincia y un mensaje claro: la llegada del centro de innovación belga IMEC a Málaga debe convertirse en un motor de progreso para toda la provincia.
“El despegue de Málaga capital debe irradiar oportunidades, progreso y prosperidad al resto de los municipios”, ha reivindicado el presidente de la Diputación, Francisco Salado, durante la gala de entrega de las Medallas de Oro de la Provincia, donde han sido reconocidos el cantautor Pablo López, el Consorcio Provincial de Bomberos, el Grupo Navarro Hermanos, el alcalde de Málaga Francisco de la Torre y la Fundación El Pimpi.
En un discurso cargado de convicción, Salado ha destacado el momento histórico que atraviesa la provincia, enmarcado en un escenario mundial convulso: “El orden mundial, tanto político como económico, se enfrenta a una crisis como no hemos conocido en los últimos cincuenta años. Tenemos la certeza y la seguridad de que los malagueños queremos liderar nuestro futuro, ser protagonistas de los cambios y no meros espectadores”, ha enfatizado.
Reconocimientos a quienes engrandecen Málaga
La ceremonia también rindió homenaje a personas y entidades que, desde su labor diaria, contribuyen al desarrollo y al alma de la provincia:
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Consorcio Provincial de Bomberos: Con 402 efectivos y presencia en 98 municipios, su trabajo incansable en emergencias locales e internacionales ha sido reconocido. Un homenaje especial fue para el bombero José Gil, fallecido en 2018, cuyo nombre llevará el parque de bomberos de Antequera.
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Fundación El Pimpi: Nacida de la emblemática bodega malagueña, la fundación, presidida por Luis Merino, destaca por su labor social, cultural y educativa a través de iniciativas como Soles de Málaga, Castañuelas Rosas o el apoyo al Museo Revello de Toro.
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Grupo Navarro Hermanos: De una pequeña tienda en Vera a una empresa con 20 centros en Andalucía y más de 230 trabajadores, la trayectoria de Navarro Hermanos es un ejemplo de emprendimiento y compromiso social.
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Francisco de la Torre: Con una trayectoria política de más de cinco décadas, el alcalde de Málaga ha sido reconocido como uno de los grandes artífices de la transformación urbana, cultural y económica de la ciudad. “Alguien que ama a Málaga por encima de todo”, se destacó en su homenaje.
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Pablo López: El cantautor malagueño, que pasó de tocar en hoteles y en el metro de Londres a llenar estadios en España y Latinoamérica, recibió la Medalla de Oro por su brillante carrera y su vínculo constante con Málaga. “Eres nuestra bandera, Pablo”, concluyó emocionado Salado.
Apostar por el Guadalhorce y los retos pendientes
Durante el acto se puso en valor el potencial del Valle del Guadalhorce, impulsado por proyectos como el Caminito del Rey o el Corredor Verde, y se recordó el papel fundamental de la aceituna aloreña en la creación de la marca Sabor a Málaga.
Sin embargo, también se subrayaron los desafíos que amenazan el crecimiento de la provincia: movilidad, vivienda y recursos hídricos. Para afrontarlos, se reclamaron inversiones decididas y reformas que aceleren los trámites administrativos.
En materia de infraestructuras, se incidió en la urgencia de ampliar y mejorar el servicio del Cercanías del Guadalhorce, la continuación de la autovía A-357 y mayores inversiones en abastecimiento de agua.
Un futuro compartido
La gala, que contó con la participación de autoridades locales y regionales, dejó patente la vocación de la Diputación de Málaga: liderar, coordinar y tejer redes entre los 103 municipios para construir juntos un futuro de oportunidades.
Una jornada de reconocimientos, sí. Pero también un llamado a la acción: a no conformarse, a innovar, a crecer desde el orgullo de ser malagueños.
