Si eres de los que los que acusa los cambios de hora y has necesitado más café del habitual para mantenerte despierto debes saber que no eres el único al que le pasa. Muchas personas sufren alteraciones en los ciclos del sueño, se encuentran de mal humor y especialmente cansados. Por suerte, es sólo cuestión de días, hasta que el cuerpo se aclimate al nuevo horario y se nos pase este pequeño ‘jet lag’.
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Son muchos los colectivos que reclaman que España mantenga el horario que le corresponde por su situación geográfica, aunque sigue primando el criterio del ahorro de energía para llevarla a cabo dos veces al año. En primavera el cambio nos resta una hora, y según dicen los expertos suele costarnos más habituarnos que en el cambio que se produce en otoño.
Si a los adultos nos afecta los que más lo notan son los niños y las personas mayores. Alterar su rutina los desorienta y en los bebés incluso les puede provocar un trastorno en la alimentación. Estos sectores de la población son los que más tiempo tardan en adaptar sus ritmos biológicos al reloj.
Si tienes niños en edad escolar esta semana es la que más te costará despertarles por la mañana y meterlos en la cama por la noche porque ven que aún es de día. No desesperes si están más irritables o nerviosos, es sólo una hora pero su cuerpo tiene que adaptarse.
Siguiendo unos pequeños consejos puedes adaptarte antes y seguro que lo llevarás mejor.
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.- Aunque estés tentado a cerrar los ojos unos minutos después de comer, si no está en tu rutina habitual no lo hagas.
.- Intenta acostarte un poco antes por la noche.
.- No cambies el horario en el que comes o almuerzas normalmente.
.- Practicar un poco de ejercicio físico siempre ayuda también al cerebro.
Poco a poco tu cuerpo se irá adaptando a la luminosidad y al nuevo horario y antes de que te des cuenta estarás totalmente adaptado.
