La cita con la moda en Málaga era a las 20:30 de un viernes templado de septiembre. Allí estuvimos, en primera fila, dispuestos a no perder puntada de las propuestas y contáoslo en vivo en instagram.
Más de 15 mil personas se dieron cita en una abarrotada calle Larios. Hubo quien con tal de no perder detalle lo vio de principio a fin de pie. Algo más de 20 minutos después de la hora programada comenzaba el espectáculo, y es que no había forma de despejar la alfombra azul de miles de personas que no querían irse de allí sin compartir su foto en las redes sociales sobre la pasarela más larga de Europa. Los asistentes, en general, vestidos muy normal. Vimos pocas estridencias entre los invitados, y aunque alguno iba disfrazado, en su mayoría Málaga ha entendido que este tipo de eventos son para vestirlos también desde el público.
La presentadora, una vez más, fue la periodista Jacqueline Campos, vestida en esta ocasión con un diseño de Javier Alcántara.
La encargada de realizar el desfile inaugural fue la malagueña más internacional; Sonia Peña. Sus últimas colecciones se han caracterizado por vestir a la mujer del glamour y el romanticismo de los años dorados del cine de Hollywood. Esta vez, y como había prometido, sorprendió con `Scarlett´ .
Una versión actualizada de los diseños que luce durante tres horas en la pantalla la protagonista sureña de «Lo que el viento se llevó” y que ya presentó en Gaudí. Vestidos que estilizan el cuerpo de una mujer intrépida, caprichosa, inconformista y en cierto modo rebelde que reivindica su sitio. Sonia Peña presenta para la próxima primavera una colección que perdurará en el tiempo. Vestidos intemporales que van más allá de las modas del momento y que se pueden mantener en el armario durante años reservados para las grandes ocasiones.
Nos mostró diseños que enseñan la piel de la mujer en su medida justa, tanto en escotes, espalda y la raja de los vestidos que dejan entrever la pierna. Flores como aplicación o bordadas sobre transparencias en siluetas muy trabajadas. Volúmenes acentuados, grandes estampados florales y colas en los modelos sirena más deslumbrantes.
Los colores predominantes el verde esmeralda, la combinación del blanco y negro, y el rojo pasión. Para las más discretas un elegante e intenso Klein y la plata metalizada, ¨glam¨ para las más atrevidas. Todos ellos acompañados de grandes pamelas como complemento estrella. Sonia Peña nos mostró a una Scarlett mucho más cómoda e independiente que no necesita a Mammy para que la ayude a vestirse.
Hugo Clavelina, fue el segundo en pisar la alfombra azul. El cordobés estuvo transgresor, como siempre en su corta pero ascendente carrera. Menos torero y más circense presentó `Ilusiones´.
El diseñador bucea en su niñez y reproduce en su colección los recuerdos llenos de colores que le evocan el espectáculo del circo. Modelos entre la realidad y la ficción de su tan no lejana infancia, ya que sólo tiene 20 años. Con mirada de niño sorprendido hay que mirar unos diseños desenfadados y alegres en los que el circo y sus colores se plasman en seda, luneta, acrílico, hilos, algodones y popelines. Sobre la pasarela pudimos ver los tradicionales cortes angulosos a los que nos tiene acostumbrados cargados de bordados, gasas, encajes y pedrerías sólo aptos para los hombres más atrevidos. Se llevó una de las ovaciones de la noche ante el desfilar de uno de sus modelos vestido sólo con encaje negro. Entre los complementos destacaron sus pajaritas de madera talladas a mano. Una colección dirigida a un hombre divertido, aventurero y sin complejos que no quiere más de lo mismo.
El circo dejó paso a una mujer que nace en el mar, con su belleza y sus misterios. El diseñador malagueño Jesús Segado presentó ‘Morgana‘.
Segado continúa en su línea de mostrar a una mujer elegante, mediterránea y sin estridencias, donde predominan los tonos azules y verdes, pero con nuevas pinceladas. De este modo, el modisto vuelve a sorprender con su capacidad creativa en el manejo de la alta costura artesanal y su transformación de los tejidos elevándolos de categoría hasta hacerlos únicos y exclusivos, donde este año introduce como novedad la técnica ‘patchwork’. Esta innovación fue una de las más aclamadas del modista.
Se mantuvo en su estilo al no dejar de lado las incrustaciones de pedrería, pailletes, cristal y aplicaciones en punto y croché.
Sobre la alfombra azul Jesús Segado mostró una colección muy fiel a si mismo con las señas de identidad de la marca, como las novias con trazos de color. En esta ocasión se atrevió con el amarillo flúor, y pese al atrevimiento acertó de lleno. Característicos también del diseñador son bolsillos y motivos de la naturaleza. Otra de las piezas destacadas fue de ‘Morgana’ fue un abrigo largo, verde, con el que vestir este invierno de esmeralda. Segado demostró estar en un punto álgido de su carrera, asentado, con las ideas muy claras y muy seguro de sí mismo. Y eso lo transmitió a la totalidad de sus diseños.
Angel Palazuelos llenó la pasarela de primavera con flores y presentó su colección bajo el nombre de `Las flores de Guzmán´. El nombre lo toma de su colaboración con Viveros Guzmán que se ha materializado tanto en los originales tocados como en los detalles. El que fuese `Alfiler de oro´en la pasada edición volvió a sorprender con su puesta en escena, algo a lo que da mucha importancia en los desfiles.
Sobre la alfombra veinte diseños, diez de su línea Ángel Palazuelos Men & Accesories y diez de su línea femenina de alta costura en la que los tejidos destacaron por su riqueza y su elaboración mimada y artesanal. Mucha transparencia en los vestidos. Ellas muy Eva y ellos muy Adan en el Paraiso Prometido. Espectaculares los tocados de flores.
La diseñadora extranjera Ikram El Louah mostró sobre la pasarela su talento con las agujas, convirtiendo el caftán en pieza estrella de su colección y una prenda ideal para trasladarnos al espíritu exótico y la magia de las mil una noches.
García Galiano Couture presentó una colección marcada por el protagonismo de los abrigos; sofisticados y con una aire fresco y juvenil. Los tonos predominantes los dorados, el beige y ocre. La diseñadora de Alhaurín el Grande eligió para sus diseños la seda natural y organzas bordadas, en una gama de colores que giran en torno a los dorados, beige y ocres. Vestidos de fiesta largos, elegantes y originales, llenaron la pasarela con predominancia de el dorado y el morado.
Pero si hay alguien que vivía una noche especial esa era Gemma Melé. A la emoción propia de presentar sus propuestas en la Pasarela Larios se sumaba la concesión del `Alfiler de Oro´.
Gemma Melé en su gran noche rompió con lo que hasta ese momento habíamos visto sobre la alfombra azul. `Glamour´está basada en los tejidos Chanel y compuesta por vestidos cortos muy femeninos y muy trabajados, con adornos de pedrerías, encajes, guipours bordados en los tejidos difuminando la unión de las costuras. Una confección artesanal y que mostraba especial mimo en los acabados con pasamanerias teñidas a juego y fornituras de lujo. Diseños muy ponibles pensados para una mujer urbana y para formar parte para siempre del fondo de armario. Melé contó para el desfile con los espectaculares tocados de Rosario Berrocal y los pendientes de Belén Zotano.
30 años, como Melé, cumple también en el oficio el diseñador malagueño Rafael Urquizar. Como homenaje su colección lleva por nombre `Thirty´. Una propuesta que muy femenina y sensual. Tejidos vaporosos, seda, satén, rasos, transparencias, tules, rasos y encajes para una mujer clásica pero con mucho estilo. Los colores predominantes el rojo, verde jade, champán, oro rosa y el negro. Talles muy altos que llegan hasta el pecho marcando el corte con cinturones o aplicaciones predominan en esta colección del modista. Las novias ocupan un lugar destacado con una propuesta muy variada pero con un denominador común: la elegancia por encima de todo. El colorido de los vestidos nupciales van desde el nácar y el crema al blanco azahar mezclado en algunas ocasiones con bordados en negro o plata.
El diseñador ha conseguido plasmar un estilo muy contundente con líneas muy depuradas y con sutiles volúmenes.
Javier Alcántara se decantó por una mirada al arte del pasado y presentó `Chic Decó´. Diez modelos inspirados en el Art Deco, movimiento artístico que surgió en los años 20 y que se prolongó casi hasta mitad del siglo pasado. Una colección con base en aquella época pero en armonía con la moda actual. Trajes muy elaborados con detalles en cristales, hilo de seda y plumas, para crear bordados y piezas únicas de alta costura con motivos extraídos de la corriente artística a la que representan. El protagonismo de la combinación del blanco y negro con los reconocibles símbolos del art deco fueron un acierto absoluto.
Y no nos movemos de la inspiración en el siglo pasado pero esta vez en moda masculina. El ‘sport deluxe’ de Marioteo con su aire ‘british’ nos trasladó a la Inglaterra post victoriana con un conjunto de prendas con un indiscutible toque dandi, que en esta ocasión se inspiran en la vestimenta deportiva de principios del siglo XX en disciplinas como la caza, la navegación o el golf. Marioteo nos mostró a un hombre elegante , con prendas de calidad en tejidos como el príncipe de gales, el tweed o el tartán y una gama de colores muy invernal que van del gris al verde militar pasando por el camel.
Detalles en cuellos y puños llaman la atención en un hombre que busca una imagen distinguida al elegir sus americanas, chalecos, pantalones, abrigos y camisas. Los complementos hasta hace poco casi exclusivos del universo femenino toman relevancia en corbatas, pajaritas y pañuelos que acompañó de zapatos y bolsos de Abraham Zambrana, colaborador habitual de la firma y el perfecto complemento para Marioteo.
Jorge Sánchez se inspira en los colores del ‘Oasis’ para esta colección: Mostaza eludiendo a la arena de las dunas, el caldera del atardecer en el desierto, y el azul que representa a la vegetación y el agua. Adquiere protagonismo el negro como símbolo de la noche. Diseños cuidados en los que fusiona toques africanos y flamencos con volantes y plisados.
La colección que Valerio Luna nos devolvió al pasado, algo constante en casi todas las propuestas de la noche. En esta ocasión a la ficción del cine y sus grandes musicales. La línea de trajes de novia inspirada en Nicole Kidman en Moulin Rouge (banda sonora de su desfile) con pinceladas de negro y adornados de pedrería, o la predominancia de negro y rojo para los vestidos de fiestas fueron el sello de su colección. Las novias en blanco y negro para las mujeres elegantes pero atrevidas. El diseñador Valerio Luna pertenece al grupo nupcial Higar Novias.
Carla Ruíz mostró una representación de los diseños que forma parte de su colección ‘Palais Royal’, inspirada en una mujer llena de feminidad y elegancia. Sin olvidar el color, hay que destacar los increíbles cortes de sus patrones que ensalzan la silueta de la mujer y por supuesto las ricas texturas de sus tejidos. Sobre todo mucha textura, rozando el barroco pero con un aire renovado que no lo hace recargado ni excesivo. En su justa medida. Vestidos confeccionados con tejidos muy ricos y volúmenes muy estudiados con los que nos transportó a la época isabelina, en el que las coronas, los tocados y los detalles dorados tomaban protagonismo en los complementos. Todo acompañado con grandes joyas y adornos florales de lo más diverso.
Asunción Retamero nos hizo durante su desfile ver la vida en rosa con una colección muy pastel. Con su ‘Pink Life’ quería rendir homenaje a la mujer y las fases por las que pasa en la vida. Inspirada en los sueños de un mundo mejor en el que todo sea color de rosa Retamero dio protagonismo al color en sus distintas tonalidades. Desde el rosa más claro que simboliza la inocencia de la niñez, a un tono más chicle y atrevido para la juventud, hasta los malveados pasando por talcos y nudes. Todo con mucha aplicación floral y muchos brillos.
Los tejidos y materiales sobre la pasarela muy variados, desde tules en 3 variantes de materiales y colores, organzas bordadas, encajes, chantilies ,encajes franceses, italianos y nacionales en algunos casos pintados a mano bordados con cristal.Las modelos desfilaron con joyas de Inridelo y los zapatos de la Boutique del tacón.
Y sí MarioTeo nos transportó a Inglaterra y Jorge Sánchez al desierto, Bartolome Barrera presentó una colección inspirada en las vestimentas tradicionales del sur de Rusia. A través de un estudio pormenorizado estampado típico ruso y sus distintas aplicaciones en el vestir, Barrera ha conseguido una actualización con patrones de gran complejidad técnica y prendas más versátiles y contemporáneas. Así, los modelos de la colección se caracterizan por faldas de gran vuelo, chalecos y casacas, blusas, chaquetas y pantalones en una gama de colores viva pero otoñal, con concesiones en detalles. Tonos cálidos como los rojos o anaranjados se funden con verdes y dorados con resultados lujosos y elegantes. Una explosión de color y un trabajo minuciosos en la fusión de diferentes tejidos dan como resultado un gran trabajo.
La diseñadora internacional, Mona Al Mansouri, participaba por primera vez llegada de los Emiratos Árabes. Ella fue la encargada de cerrar la pasarela con su particular estilo.
El equipo de peluquería al frente del impecable trabajo de estilismo estaba formado por Carlos Rufo, Diego Montiel, Fali, Mochi, Antonio Eloy y Rafael Bueno. El maquillaje era obra de Arteness.
Destacar de manera especial el trabajo de las modelos, para las que en muchos casos fue complicado recorrer con un paso tan acertado los trescientos metros de pasarela subidas a tacones de vértigo. Profesionalidad impecable.
Fotografías: Lorenzo Carnero, Javier Nuñez – Agencia punto press