Finca Besaya volvía a abrir sus puertas tras la remodelación de sus instalaciones. Cientos de personas se dieron cita en la que era su fiesta de reapertura.
Allí pudieron comprobar el resultado. Gracias a ella la parte baja de Finca, incluida la ampliación ejecutada hace un par de años con Bar Baro, se convierte en restaurante.
Con un nuevo mobiliario y nueva disposición han conseguido espacios más acogedores que crean el ambiente idóneo para disfrutar de una maravillosa cena y continuar luego de copas sin moverse del lugar.
La zona de restauración de la parte alta de Finca Besaya se abrirá únicamente para eventos y grupos durante el invierno. Mientras la actividad del local se concentrará en la parte baja, donde después de la cena está garantizada la buena música, la diversión y el espectáculo. Todo lo necesario para un ambiente que te envuelve y hace que pierdas el sentido del paso de las horas.
Marbella recupera así uno de sus restaurantes y locales emblemáticos.
Fotografía: Javier Nuñez