La Global Gift Gala se ha convertido en una cita ineludible para muchas personalidades y rostros conocidos a nivel internacional que se trasladan a Marbella para participar en el gran evento solidario. No podemos olvidar que detrás del photocall o de ver qué modelo llevaba ésta o aquel, estas galas tienen un objetivo más que loable; el de conseguir fondos para ayudar en causas que van destinadas a los más desfavorecidos. En este caso sobre todo a la infancia. 250 personas respaldaron a la fundación asistiendo al evento.
Si este año la gran ausente ha sido Eva Longoria por su reciente maternidad, María Bravo, cofundadora y presidenta de la Fundación ha demostrado que no le faltan herramientas para darle esplendor a la noche. Para ello ha contado con grandes aliados como artistas y celebrities entre los que se encontraban Luis Fonsi, Chenoa, Vogue Williams, Spencer Mathews, Laura Hamilton, Montse Hidalgo, Beatriz de Orleans, Manolo Santana, Andrea Mclean, Lisa Scott Lee, Rosa López, Chenoa, Nuria Fergó, Rafael Amargo, Niña Pastori o Carla Barber.
Hay quien pueda pensar que se podrían recaudar los mismos fondos sin la necesidad de montar estos encuentros, sin la necesidad de la alfombra roja o la suntuosidad que los caracteriza, pero hay que ser realistas, y el mundo en el que vivimos no es así y posiblemente nunca lo haya sido, aunque haya excepciones. Por eso son tan necesarias este tipo de acciones.
Gran Meliá Don Pepe es desde hace siete años el lugar elegido por la organización para reunir a sus benefactores en torno a esta gala que contribuye a que la Fundación Global Gift pueda llevar a cabo sus proyectos solidarios en diferentes puntos del mundo.
María Bravo se encargó de agradecer en público en varias ocasiones el esfuerzo que hace el hotel y todo su personal, que durante toda la jornada trabaja de manera altruista y pone su tiempo a disposición de la Global Gift. Además, destacó que todo lo que se recauda es 100% para acciones benéficas gracias a los patrocinadores.
Profesionales y voluntarios suman esfuerzos para que todo sea perfecto. Cada uno pone lo mejor de su parte para que los invitados, los que han pagado su entrada para contribuir con esa labor, durante la cena y la gala lo pasen en grande. Ellos disfrutan de una noche mágica y a las personas a las que van destinados los fondos, en algunos casos, les cambiará la vida.
Para las celebrities la fiesta comenzaba la noche antes con una recepción en el Beach Club de María Bravo, Playa Padre. Fiesta, pero sin excesos, porque el domingo por la mañana amanecía con visita a la Casa Global Gift para comprobar con sus benefactores los avances de la obra y agradecer a los colaboradores y nuevos donantes su aportación para poder costear de la finalización del centro. Un centro multifuncional para niños con enfermedades raras o crónicas que está ubicado en Marbella y que dará cobijo al menos a 5 organizaciones benéficas sin ánimo de lucro de la zona; Adisol (Asociación de Diabéticos de la Costa del Sol), ADAHIMAR (Asociación Social de Trastornos para Déficit de Atención e Hiperactividad), CADI (Centro de Atención a la Diversidad Infantil), Asociación contra la Fibrosis Quística y Bubbles and Dreams (Enfermedades raras y sin diagnóstico).
Los asistentes a la gala pudieron participar también de esa visita gracias a un vídeo que se proyectó durante la cena.
El cóctel en los jardines era momento de encuentros. En las mesas dispuestas en los jardines de Gran Meliá Don Pepe lucían los arreglos florales de Virginia Florista. Todo estaba dispuesto desde horas antes para recibir a los comensales.
Sobre el escenario dos presentadoras de excepción: Lorena Bernal y la presentadora de origen egipcio y recién llegada de Dubai, Enjy Kiwan.
El sabor de la cena corría este año a cargo de cuatro grandes chefs, los que firmaban el menú solidario de la VII The Global Gift Gala Marbella: el chef ejecutivo del Gran Meliá Don Pepe, Víctor Carracedo abre las puertas de sus fogones a los reconocidos y chefs “estrella Michelín” Paolo Casagrande, chef del restaurante Lasarte, el argentino Mauricio Giovanini del Restaurante Messina, José Carlos Fuentes de Club Allard e Iván Domínguez, del restaurante Alabaster.
Pero sí el protagonista en la mesa era el sabor de los platos, el protagonista indiscutible de la noche era el artista internacional Luis Fonsi, que recibía en el transcurso de la gala el premio “Global Gift Philanthropist Award” en reconocimiento a su trabajo humanitario para salvar la vida de niños con cáncer y en la reconstrucción de su Puerto Rico natal.
Fonsi agradeció el premio, destacó la labor de la Fundación y se atrevió, animado por Lorena Bernal, a interpretar Despacito a capella.
El otro gran protagonista, fue Adrián Martín. A María Bravo le faltaban las palabras y se llenaba de emoción al hablar de él y del ejemplo de superación que suponía para todos. Para él hubo otro premio, The Global Gift Inspiration Award Speech, que recogió pidiendo a todos que ayudasen a que otros niños pudiesen vivir mejor. El público le dedicó un fuerte aplauso, que María Bravo hizo extensivo a sus padres, Toñi y Rafa, que le acompañaban.
Gracias a una subasta en la que los asistentes pudieron pujar por obras de arte, joyas y la experiencia de vivir la gala en Londres, se incrementaron considerablemente los fondos recaudados. Además se pidió a los comensales que participaran con donaciones de Mil euros y más de 20 personas subieron al escenario respondiendo a esta petición.
Durante la cena actuaron en directo el cantante y actor Gary Dourdan, protagonista de la serie CSI y el cantautor británico James Arthur.
Pero si hubo alguien que consiguió estremecer al público y ponerlo en pie, fue Niña Pastori, que ofreció un pequeño concierto en el que interpretó varios temas. Rafael Amargo salió al escenario y se marcó unos bailes que arrancaron los aplausos del público.
El baile y el ritmo del cantante y compositor Descemer Bueno, coautor de los éxitos ‘Bailando’ y ‘Súbeme la radio” de Enrique Iglesias, acompañado por la cantante Dama, hicieron que el fin de fiesta fuese con todo el mundo puesto en pie y bailando ante el escenario.
Así concluyó una noche en la que Gran Meliá Don Pepe se llenó de estrellas, pero sobre todo de solidaridad.
Fotografía: Lorenzo Carnero