Comienzan las vacaciones navideñas y, con ellas, uno de los momentos más temidos por muchos padres: cómo entretener a los pequeños de la casa. Y es que durante estas dos semanas, estos esperan ansiosos un sinfín de planes con los que divertirse y llenar sus días hasta la vuelta al cole.
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¿Cómo podemos afrontar estos días para que no se conviertan en una auténtica tortura? ¿Qué tipo de actividades podemos hacer con los peques para conseguir que disfruten antes de la vuelta al cole? Os proponemos una serie de planes de lo más interesantes con los que conseguiréis disfrutar de la Navidad rodeados de niños sin morir en el intento. Planes baratos, familiares y muy, muy divertidos. ¿Os apuntáis?
1.- Paseo en familia por la calle Larios.
Todo un clásico de la Navidad malagueña. Y es que en estas fechas, la arteria central de la ciudad saca sus mejores galas para recibir una de los momentos más especiales del año. Luces por doquier, arcos grandilocuentes y un hervidero de transeúntes que asisten ensimismados al espectáculo de luces, colores y música preparado este año por el consistorio de la capital. Las bóvedas situadas a lo largo de toda la calle Larios servirán como pantallas para la proyección de un cuidado espectáculo, que se repetirá dos veces al día (a las 18:30 y a las 21:30 horas) y tendrá una duración de dos minutos. Un espectáculo único en España del que esperan se convierta en reclamo de excepción para conseguir que bares y comercios hagan su agosto en pleno verano. Sin duda, ¡una oportunidad única de ver brillas las caras de los peques!
2.- ¡Se ruega tocar!
¿Os imagináis un museo en el que puedan tocarse todas las piezas expuestas? Es más, ¿os imagináis un museo en el que, precisamente, se os incite a tocar todos esos elementos? Pues eso es, precisamente, lo que ocurre en el Museo Interactivo de la Música de Málaga (MIMMA). Un lugar original y divertido como pocos en el que pasar una entretenida tarde en Navidad. En él, los niños se divertirán a la vez que aprenderán, estableciendo un diálogo con las piezas expuestas al poder tocar directamente todos los instrumentos disponibles. Si queréis pasar una tarde realmente completa, podéis combinar la vista al MIMMA con el paseo por la calle Larios una vez que anochezca. Y para completar la jornada y entrar en calor, no olvidéis tomar un chocolate calentito. ¡Hará las delicias de los niños y no tan niños!
3.- Un poco de historia para las vacaciones
Declarado Patrimonio Mundial en julio de 2016, el Conjunto Arqueológico Dólmenes de Antequera es una opción de lo más atractiva para alguna de las jornadas de las vacaciones navideñas. Si los niños de la casa son intrépidos, entonces ésta será vuestra mejor elección para pasar un día de lo más entretenido combinando diversión con historia. Os recomendamos que os decidáis por una visita guiada de las ofertadas por el conjunto arqueológico porque así, podréis conocer un sinfín de detalles y curiosidades sobre uno de los enclaves con mayor historia de nuestro país. Aprovechando que estáis en la zona, no os vengáis sin visitar el Paraje Natural de El Torcal –muy conocido en Europa por las curiosas formas que poseen sus rocas calizas- y sin contarles a los niños la historia de La Peña de los Enamorados donde, según cuentan, unos enamorados (un cristiano y una princesa mora) se arrojaron al vacío para unirse en la eternidad. Una jornada, sin duda, que no dejará indiferente a los más curiosos.
4.- ¡A respirar aire fresco!
Si el tiempo acompaña durante estas vacaciones navideñas, nada como hacer una excursión por la Senda Litoral; un itinerario compuesto de un total de 12 etapas en las que, a lo largo de sus 200 kilómetros de longitud podréis visitar parajes excepcionales de un incalculable valor natural. Además, si os atrevéis, podéis montar las bicis en el coche y aprovechar para recorrer sus innumerables caminos y pasarelas de madera que os llevarán a enseñar a los niños lugares tan bonitos y especiales como los Cantales de La Araña, el Peñón del Cuervo, las Dunas de Artola o la desembocadura del río Guadalhorce. Una buena oportunidad, sin duda, para que los niños entren en contacto con la flora y la fauna, no sólo de forma directa en el lugar, sino a través de los numerosos paneles informativos que explican de forma muy pedagógica la naturaleza que rodea la franja litoral de la zona.
5.- Algo de deporte nunca viene mal
Es lo que precisamente te proponemos con el plan que te presentamos a continuación. ¿Qué os parecería pasar un día de Navidad inmersos en una ruta de senderismo especialmente indicada para los niños? Y es que Málaga puede presumir de ser una de los enclaves más montañosos de España. Sin embargo, también existen itinerarios suaves, cortos e interesantes, que ofrecen jornadas especialmente indicadas para pasar en familia en plena naturaleza. De todas las rutas posibles, os recomendamos el paseo de los Pinsapos. Localizado en Sierra Bermeja, permite disfrutar de una agradable caminata sin que los niños se aburran. A través de un camino estrecho, pero de escasa dificultad, los niños podrán disfrutar de un sinfín de especies animales y vegetales. Otra opción, es en Marbella y, justo antes de la playa de Cabopino, podréis ver uno de los enclaves geológicos más singulares del litoral malagueño, el complejo dunar de Artola. Para conocerlo, nada mejor que apostar por una preciosa ruta de senderismo prácticamente llana. Además, los pequeños ahora lo tienen mucho más fácil en este corrido porque han colocado pasarelas de madera que les permiten caminar con total seguridad por esta bonita zona costera.
6.- ¡Prueba con el Caminito del Rey!
SI lo que queréis es hacer que los niños vivan una auténtica experiencia para los sentidos, entonces el plan perfecto es, mochilas a la espalda, hacer el Caminito del Rey. Si decidís poner un poco de aventura a la Navidad, lo primero que debéis sabes es que esta opción sólo es válida si tenéis niños mayores de 8 años, dada la dificultad de algunas de sus tramos. Además, tampoco podemos coger a los niños en brazos y estos siempre deben ir acompañados por un adulto. Con independencia de las normas –que siempre hemos de tener en cuenta- es una experiencia espectacular para los niños, que a los largo de un trazado compuesto por 1600 pasarelas aéreas colgadas a 100 metros de altura, tendrán la oportunidad de sentir la adrenalina en sus cuerpos como nunca antes lo habían hecho. Importante, ¡es necesario hacer una reserva!
Foto: Juan María Álvarez
7.- Una Catedral bajo tierra
Visitar las Cuevas de Nerja. Todo una recomendación clásica de la zona; así es que si aún no has descendido a contemplar uno de los enclaves más conocidos de Málaga y Andalucía, las vacaciones de Navidad son la mejor oportunidad para hacerlo. Visitar las Cuevas de Nerja es, para los más pequeños, una oportunidad única de ver algo que quizás no hayan visto nunca: las pinturas rupestres. Sus 35.000 metros2 están divididos en tres zonas que harán las delicias de los niños: las galerías turísticas, las galerías altas y las galerías nuevas. Gracias a su estupenda acústica se organizan conciertos y espectáculos de danza en su interior, por lo que quizás tengáis suerte y alguno de ellos coincida con vuestra visita.
Como verás todos los planes que te proponemos son divertidos y suponen un valor añadido a las vacaciones escolares. Te recomendamos que hagas muchas fotos, aunque ellos seguro que guardarán las imágenes entre sus recuerdos como un gran regalo de Navidad.
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