Nieves Álvarez cuenta con más de 25 años de carrera como modelo en los que han destacado su profesionalidad y su discrección. Su belleza serena y elegante son fiel reflejo de su manera de comportarse durante todos estos años. Siempre ha intentado vivir alejada de los focos de los medios del corazón. Generalmente, solo la hemos podido ver allá donde ha asistido por motivos de trabajo.
Pertenece a ese grupo de top models que aparecieron en los 90 siendo aún casi unas niñas. Con el paso de los años, Nieves ha sabido evolucionar y adaptar los trabajos a su edad, de esa forma ha sabido mantenerse en el tiempo en lo más alto del ranking.
Yves Saint Laurent apostó por ella en el 92 y fue una de sus modelos de referencia hasta la retirada de él en el 2002. Ha desfilado en la principales pasarelas del mundo luciendo los diseños de Christian Lacroix, Giorgio Armani, Prada, Gianfranco Ferre, Oscar De La Renta, Carolina Herrera, Paco Rabanne, Herve Leger o Emauel Ungaro entre otros. Eso, además de ocupar en numerosísimas ocasiones las portadas de las revistas más importantes tanto nacionales como internacionales.
En todos estos años, Nieves Álvarez ha mantenido una activa campaña para difundir los perjucios de la anorexia y advertir a las jóvenes de la necesidad de llevar una dieta equilibrada.
En 2002 vivió uno de los momentos personales más importantes de su vida, su matrimonio con el fotógrafo Marco Severini. Desde entonces este se convertiría en su compañero de vida y su gran aliado en su profesión, caminado junto a ella allá por donde la llevase su carrera. Tras 20 años de relación y tres hijos en común, la pareja puso fin a su matrimonio en 2015. También en eso fue discreta.
Desde 2012 trabaja como presentadora en el programa «Flah moda» en la 1 de TVE donde se tratan temas actualidad, tendencias, cultura y moda.
Una cara bonita, un cuerpo espectacular y una cabeza bien amueblada, acompañada por un comportamiento extraordinario, le han valido el reconocimiento y la admiración del público, pero también en el de los grandes diseñadores y firmas que la siguen eligiendo como su imagen representativa.
Está en esa edad en la que las mujeres empezamos a tener más claras muchas cosas, pero sobre todo lo que no queremos, que ya es mucho. Eso nos hace sernos más fieles a nosotras mismas y aprender a querernos y aceptarnos.
Nieves Álvarez es madrina de Maserati y desde hace cuatro años entrega la Copa de plata Maserati de alto hándicap en Santa María Polo Club. Antes de disfrutar en primera fila del torneo, Nieves posa ante los medios de comunicación atenta, amable, y siguiendo las indicaciones de los fotógrafos.
Tenemos un momento para hablar con ella. Podría haberle preguntado por sus secretos de belleza, pero con tan solo unos minutos que nos conceden para esta entrevista creo que hay temas más interesantes de los que hablar.
Mujer, madre, divorciada y trabajadora, me interesa más conocer cómo ve Nieves Álvarez a la mujer en la actualidad.
Nieves, cuentas con más de 25 años de carrera y en ese tiempo has sido madre y has vivido una separación ¿Cómo ves la situación de la mujer actual?
Soy mujer y es verdad que la situación cambia, pero cambia tanto para hombres como para mujeres. Soy una persona muy realista con la vida y creo que las mujeres tenemos una capacidad sorprendente de trabajo y de organización para desempeñar cualquier papel. Me considero una mujer muy positiva que sabe adaptarse a todas las situaciones de la vida ya sean mejores o peores.
En la vida hay que luchar, hay que sonreír siempre y sonreír sobre todo a las adversidades o a los cambios.
«Las mujeres tenemos una capacidad sorprendente de trabajo y de organización»
¿Cuáles son los retos que tenemos ahora las mujeres trabajadoras, por ejemplo?
Los retos se los pone uno a sí mismo. No tenemos que demostrar nada a nadie. Está más que comprobada la capacidad de la mujer de trabajo, de organización y de liderazgo.
Y compaginar todo eso con la maternidad…¿Ha llegado el momento de dejar de sentirnos culpables?
Yo creo que eso depende del carácter de cada mujer, aunque también es verdad que siempre tendemos a abarcarlo todo. Parece que no saber delegar es algo innato nuestro, que podemos hacer muchas cosas a la vez y además hacerlo bien.
En la maternidad no puedes saber si lo estás haciendo bien o mal, quizá por eso nos empeñamos más en esa capacidad nuestra de querer llegar a todo y en ocasiones nos autoexigimos demasiado. Tenemos que aceptar que la maternidad y la familia son dos cosas distintas. Las mismas labores que desempeña una madre puede desempeñarlas un padre sin ningún problema.
Bueno, te vimos en julio en Marbella, ahora estás aquí en Sotogrande, otro año más, en el polo. ¿Has encontrado momento para irte de vacaciones?
Supongo que ya se ha convertido en algo en mi agenda. Ya sé que en agosto tengo una parada aquí, una cita con Maserati y el polo. Y estoy encantada, la verdad.
He estado con mi familia y con mis hijos disfrutando del verano en la Costa Brava.
¿Como se presenta la nueva temporada? ¿Con nuevos proyectos?
¡Con muchísimos proyectos! Empiezo un mes de septiembre frenético y muy agradecida porque está siendo un año muy bueno en el que estoy haciendo cosas que me llenan mucho. Esta temporada empiezo también con la tele. Llevamos ya cinco años y todavía tenemos guardadas muchas sorpresas. Después voy a París y a Milán. Como te decía, afronto el invierno con muchos proyectos. No me puedo quejar.
«Nos empeñamos más en esa capacidad nuestra de querer llegar a todo y en ocasiones nos autoexigimos demasiado»
Has sabido mantenerte en lo más alto durante muchos años lo que en tu profesión se traduce en muchos viajes y una vida muy ajetreada. ¿Cómo te ves dentro de unos años, Nieves?
Es que no lo pienso. Soy más de vivir el presente que el futuro. ¿Quién sabe lo que te puede pasar? ¿Para qué planificar tanto?
Siempre intento mirar a corto plazo, disfrutar del día a día y sonreír cada mañana. Soy muy activa, y además lo soy desde pequeñita, creo que lo de la tranquilidad no va conmigo. Mi madre decía que tenía que ser azafata porque siempre me apuntaba a cualquier viaje que hubiera en la familia.
Pero es que va en mi carácter. Si estoy quieta, termino inventando algo.
Este verano he hablado con muchas mujeres que también llevan una vida profesional muy activa y todas coincidimos en que nos cuesta estar unas vacaciones sin hacer nada, que al segundo día ya nos estamos subiendo por las paredes…¿Te pasa a ti?
¡Y al primero! Recuerdo que una vez fuimos a una isla donde no había nada que hacer. Yo soy mucho de visitar, de conocer la cultura del sitio… Eso de tomar el sol no va nada conmigo.
Acabé apuntándome a todas las actividades del hotel. Hacía esquí acuático, yoga por las mañanas… Me parece un horror eso de no hacer nada, salvo que sea a la sombra con una novela; así sí que lo puedo hacer, pero eso de estar solo tumbada tomando el sol sin más, no puedo.
¿Estás en el momento más estable de tu vida?
No sé si el más estable. Estoy en un momento muy bonito de mi vida en el que sé lo que quiero y lo que no quiero.
«Estoy en un momento muy bonito de mi vida en el que sé lo que quiero y lo que no quiero»
¿Eso lo da la edad, las experiencias que ha vivido una, o las dos cosas?
Eso lo da la experiencia más que la edad, creo. Las experiencias es lo que te dan todo en la vida, lo que te marca. Y a veces lo que te hace madurar. Estoy en un momento muy bueno de mi vida. Estoy muy contenta, muy serena. Estoy aprendiendo a disfrutar mucho de mí misma, que a veces cuando eres una madre bastante involucrada, como soy yo, cuesta. Ten en cuenta que Adriano ya tiene 12 años (y mi altura) y los pequeños 9 para 10. Son totalmente preadolescentes pero son unos niños maravillosos.
Detrás de su piel fantástica, de su estilazo y de su elegancia hay una mujer de carne y hueso, no de papel cuché. Una mujer que ha sabido evolucionar y que como muchas otras, al llegar a los 40, descubren lo maravilloso que es disfrutar de una misma.
Fotografía: Javier Nuñez
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