El Palacio de Ferias y Congresos de Málaga ha acogido durante tres días la XXXV edición del Congreso Nacional de Medicina Estética, un encuentro anual organizado por la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME). El objetivo de estas jornadas ha sido poner en común técnicas y terapias médicas actuales del sector de la medicina estética.
Diversos ponentes de gran reconocimiento nacional e internacional han abordado temas de actualidad para el sector como son toxinas, varices, tecnología, nutrición, bienestar, terapias regenerativas, rellenos y su aplicación, efectos adversos y bulos e informaciones publicadas en internet. Uno de los temas más novedosos de este 35º Congreso Nacional de la SEME es la relación entre el genoma, el epigenoma y el microbioma en relación a la imagen, al aspecto de la piel y sobre todo al bienestar del paciente.
En este contexto y aprovechando que asistió al evento, hemos querido hablar con nuestra colaboradora, la doctora Elena Gaspar, para que nos avance qué novedades se presentan en el terreno de la estética y nos proporcione algunas de las claves presentadas en este congreso.
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de todo lo que se ha presentado?
Lo que más me ha llamado la atención es como se va consolidando esa tendencia a una medicina estética natural, buscando una belleza armónica, sin estridencias y como se va ampliando el abanico de pacientes, el margen de edades y se va incorporando al hombre a las consultas de medicina estética.
¿Cuáles son las principales innovaciones en el sector?
Dentro de las novedades, destacaría el avanzado conocimiento que tenemos de los distintos tipos de ácidos hialurónicos. Ya no hablamos de ácidos hialurónicos en general, sino que tenemos una amplia gama que nos permite decidir qué ponemos en función de lo que queremos obtener. No es lo mismo buscar volumen y proyección que buscar redensificar o trabajar en zonas dinámicas en las que el relleno tiene que adaptarse a los tejidos para conseguir una máxima naturalidad en las expresiones. También hay que destacar la aplicación del ácido hialurónico en nuevas zonas, como para redefinir el óvalo facial, proyectar el mentón o levantar la punta de la nariz.
Y, por supuesto, a nivel de aparatología, ha captado mi atención cómo se van perfeccionando las técnicas, sobre todo en eficacia e inocuidad.
¿Se apuesta cada vez más por el láser?
No cabe duda que, cada vez, el láser tiene un papel más importante en nuestras consultas, sobre todo por la gran versatilidad de tratamientos que podemos hacer, ya que disponemos de muchos tipos de láseres diferentes y eso nos amplía la variedad de indicaciones: manchas solares, melasma, cuperosis, rosácea, depilación, eliminación de tatuajes, imperfecciones de la piel como cicatrices de acné, poros abiertos, y muchas más. Sin embargo, no cabe duda que los láseres estrella son para el tratamiento de las manchas y el rejuvenecimiento facial. Nosotros, en nuestra clínica, hace un año incorporamos la plataforma láser Harmony XL Pro de Alma Láser y eso nos ha abierto una gama de indicaciones que antes teníamos que derivar porque no podíamos tratarlas, por lo que nuestros servicios son ahora más completos y nuestras pacientes están más satisfechas.
Se está hablando mucho en los últimos tiempos sobre la flacidez, ¿cuáles son los mejores tratamientos para estos casos?
El tratamiento de la flacidez, tanto facial como corporal, ha sido uno de nuestras grandes batallas, pero cada vez tenemos más herramientas como las radiofrecuencias, la carboxiterapia o los tratamientos inductores de colágeno. Realmente, podemos decir que sí son terapias efectivas.
Además, las últimas innovaciones en aparatología nos van permitiendo necesitar menos sesiones y más distanciadas, lo que también es un beneficio para nuestros pacientes. En definitiva, vamos en muy buena dirección. Podemos hablar de la excelencia en medicina estética y la consolidación de esta rama de la medicina para la que es imprescindible una continua formación y puesta al día en nuevos estudios e innovaciones.
