La investigadora postdoctoral de la Universidad de Málaga Elisabeth Sánchez Mejías ha sido reconocida con el ‘Premio Joven Investigador CIBERNED’. Este galardón lo recibe por su trabajo sobre enfermedades neurodegenerativas, publicado en la prestigiosa revista ‘Acta Neuropathologica’.
El Centro de Investigación Biomédica en Red sobre Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED), organismo perteneciente al Instituto de Salud Carlos III, convoca anualmente y a nivel nacional estos premios, dirigidos a investigadores menores de 35 años que pertenecen al grupo.
En este proyecto, Elisabeth, ha caracterizado la respuesta inflamatoria de las células microgliales en el hipocampo- región del cerebro que se encarga de almacenar la memoria- de pacientes de Alzheimer. El trabajo premiado también ha contado con la colaboración del doctor de la Universidad de Sevilla Javier Vitorica.
La investigadora forma parte del Grupo en Enfermedades Neurodegenerativas de la UMA que, actualmente, es el único representante malagueño de CIBERNED desde 2007.
CIBERNED busca el fomento de la investigación científica y técnica de excelencia en el ámbito de la salud, con el objetivo principal de transferir resultados a la práctica clínica, para la mejora del bienestar de los pacientes con enfermedades neurodegenerativas.
Elisabeth es de Mollina y tiene 34 años. Es Licenciada en Biología y Doctora por la Universidad de Málaga. Desde hace 9 años, antes de terminar la carrera, comenzó a colaborar como alumna interna en el grupo de enfermedades neurodegenerativas de la UMA (NeuroAD). Tras licenciarse hizo un máster en Biología celular y molecular en la facultad de Ciencias de la UMA y se matriculó en el programa de doctorado, todo dentro del grupo de investigación que lidera la Dra. Antonia Gutiérrez.
¿De dónde te viene esa inquietud para investigar?
Mi inquietud por la Biología vino desde la infancia y por la investigación fue todo un descubrimiento cuando comencé a trabajar en el laboratorio de mi facultad. Nunca antes me lo había planteado. La Dra. Antonia Gutiérrez me dio la oportunidad de pertenecer a su grupo de investigación y ello me ha llevado a donde estoy ahora.
¿Qué supone el trabajo de investigación por el que te han dado este premio?
En este trabajo, hemos caracterizado la respuesta inflamatoria llevada a cabo por las células microgliales (los macrófagos del cerebro) en el hipocampo de pacientes de Alzheimer (región encargada de crear los recuerdos). Y, al contrario de lo que ocurre en los modelos animales de la enfermedad o en otras regiones de los pacientes, en los que la microglía se activa y adquiere un fenotipo inflamatorio crónico y citotóxico asociado a las placas amiloides (proteínas que se acumulan extra celularmente de manera anómala), hemos demostrado que las células microgliales sufren un proceso degenerativo en el hipocampo de los pacientes de Alzheimer. Este proceso de senescencia microglial deja gran parte del parénquima nervioso sin protección inmune, poniendo en riesgo la homeostasis celular y la supervivencia neuronal. Gracias a este trabajo, hemos puesto de manifiesto la necesidad urgente de mejorar los modelos animales (hasta la fecha la única herramienta que nos permite conocer en profundidad los mecanismos patológicos celulares y moleculares) para que recapitulen todos los aspectos de la enfermedad, incluida la disfunción microglial, y así puedan garantizar el éxito translacional de los animales a la clínica.
El trabajo premiado cuenta con la colaboración del doctor de la Universidad de Sevilla Javier Vitorica, ¿cómo os habéis coordinado para llevarlo a cabo?
Nuestro grupo lleva colaborando con el Dr. Javier Vitorica y su equipo desde prácticamente los inicios. Trabajamos conjuntamente y de manera muy estrecha en la mayoría de los proyectos. En nuestro laboratorio de la UMA se desarrollan las técnicas de biología celular y en el laboratorio de la Universidad de Sevilla aquellas técnicas más moleculares.
¿Cuánto tiempo habéis tardado en desarrollarlo?
Unos 4 años.
¿Hasta qué punto es importante la investigación que estáis desarrollando ahora mismo en tu equipo con respecto al Alzheimer?
La enfermedad de Alzheimer supone la principal causa de demencia entre la población envejecida y afecta actualmente a unos 40 millones de personas en todo el mundo. La ausencia de terapias efectivas y el aumento de la esperanza de vida proyectan un aumento de la prevalencia a niveles epidémicos, con una estimación de 130 millones de afectados para el 2050. Actualmente no se conocen las causas que originan la enfermedad y no existe cura, por lo que se necesitan urgentemente estrategias para prevenir o retrasar el Alzheimer.
Sin embargo, en las últimas décadas, todas las terapias dirigidas hacia la principal diana histopatológica de la enfermedad, las placas seniles, han fracasado. En este sentido, nuestro grupo lleva años investigando en la búsqueda de biomarcadores para el Alzheimer hacia los que dirigir las terapias, empleando como herramientas tanto modelos animales como muestras post mortem de pacientes procedentes de biobancos. Los resultados obtenidos por nuestro grupo van encaminados a profundizar en el conocimiento de los mecanismos celulares y moleculares que subyacen a la enfermedad, a la búsqueda de dianas terapétuticas, así como a mejorar los modelos animales existentes al fin de garantizar el éxito de las terapias en el posterior traslado a los pacientes.
Elisabeth, ¿qué supone este premio para ti?
Recibir este premio ha sido todo un honor para mí. En primer lugar, por el reconocimiento a la gran labor investigadora y al esfuerzo de todos los que componen el grupo de investigación de la Universidad de Málaga al que pertenezco. Y, en segundo lugar, por la oportunidad que me ha ofrecido el Comité de Dirección de CIBERNED de exponer y compartir nuestro trabajo en el “Global Summit Alzheimer’s Research and Care” celebrado el pasado mes de Septiembre en Lisboa y que ha contado con la presencia de su majestad la Reina Sofía. Por último, gran parte de los resultados del trabajo premiado han sido obtenidos durante mi trayectoria pre doctoral y han formado parte de mi Tesis Doctoral, por lo que dicho galardón ha supuesto un reconocimiento extra a mi trayectoria científica en la Universidad de Málaga.
¿Te lo esperabas?
La verdad es que no. Se trata de una convocatoria a nivel nacional muy competitiva, en la que se presentan trabajos de investigación de alto impacto, procedentes de grupos de investigación muy prestigiosos.
¡Enhorabuena a Elisabeth y todo su equipo! Personas que hacen que la ciencia y la medicina avancen en la mayoría de los casos desde el anonimato más absoluto.