La expectación era máxima; pero es que la ocasión lo merecía. El Marenostrum Fuengirola acogía ayer el único concierto de Jennifer López en Europa en su gira ‘It’s my party. The live celebration’, en la que la artista de ascendencia puertorriqueña celebra su 50 aniversario alrededor del mundo. Unas 14.000 personas esperaban ansiosas en los alrededores del castillo Sohail para disfrutar de un show sin precedentes en nuestro país.
Entre los asistentes muchos rostros conocidos que no quisieron perderse el único concierto de la artista en España. Entre ellos, Cayetano Rivera, Pastora Soler, Pepón Nieto o Juan Peña.
Otros tampoco se lo quisieron perder, pero sin previo paso por taquilla, convirtiendo la playa en su propio recinto para disfrutar al menos de la voz y la música de JLo.
Desde que la artista saltó al escenario, un increíble despliegue de escenografía, vestuario y coreografías fue acompañando a sus grandes éxitos, como ‘Love Don’t Cost a Thing’, ‘Medicine’ o ‘Get right’, y sus hits más recientes, como el revolucionario ‘I ain’t your mama’.
El espectáculo prometía sorpresas y así fue. Los incondicionales de la cantante se quedaron impresionados con un concierto en el que no faltaron los fuegos, las chispas, los bailes arriesgados y los múltiples cambios de vestuario, que en este show de Jennifer López, van desde un body de pedrería asimétrico hasta un vestido rojo con falda de tul pasando por un traje verde flúor. Todos y cada uno de ellos con su micro a juego.
La reina del pop volvía a España después de siete años y lo hizo por todo lo alto, dejando constancia de que su éxito traspasa fronteras, géneros y edades. La del Bronx no dudó ni un momento en sacar a su hija Emme al escenario y cantar con ella ‘I’m your mama’.
El show estuvo cargado de luces LED y purpurinas, dos elementos que pusieron un plus de magia a esta noche de agosto en la que la súper estrella del pop celebraba su 50 aniversario en España. Y como toda fiesta de cumpleaños, no faltó que todo el público le cantase al unísono el ‘Cumpleaños Feliz’. Sin duda, un concierto sin precedentes que quedará grabado en la memoria de Jennifer López; y por supuesto, de todos los que tuvieron la suerte de estar allí.
*La nota negativa del concierto fue para la cantante, que aunque ofreció un espectáculo único, no permitió a los fotógrafos y cámaras acreditados acceder al recinto durante el concierto. Cosa bastante absurda en 2019 cuando todo el mundo graba y hace fotografías en estos acontecimientos con los teléfonos. Por eso, agradecemos especialmente a Lorenzo Carnero su habilidad para captar estas imágenes desde el exterior, lo que nos permite ilustrar esta crónica.
Fotografía: Lorenzo Carnero
