Para celebrar su apertura, el nuevo hotel Cristine Bedfor acogió una pequeña recepción en el corazón histórico de Málaga. La llegada de la marca a la ciudad marca un antes y un después en la forma de entender la hospitalidad boutique, inaugurando en Andalucía un concepto que ya había triunfado en Mahón, Menorca.
Un edificio con historia que inspira nuevos relatos
Ubicado en un edificio del siglo XIX en la calle Méndez Núñez, el hotel ha sido cuidadosamente rehabilitado por el Estudio de Arquitectura e Interiorismo de Marta de la Rica. La intervención ha buscado preservar la esencia de la antigua casa burguesa malagueña, recuperando suelos, ventanas y puertas originales. El respeto por la historia y el entorno ha guiado cada paso del proyecto, concibiendo el espacio como la casa malagueña de Cristine Bedfor: un refugio que mantiene viva la memoria de generaciones pasadas, pero abierto al viajero contemporáneo.
Habitaciones y espacios que cuentan historias
La propuesta de Cristine Bedfor va más allá del alojamiento. Cada una de las 27 habitaciones, así como el lobby y el restaurante, están dedicados a personajes imaginarios que forman parte del universo de Cristine, viajera incansable e hija de embajador. Cada tela, cada mueble y cada detalle ha sido diseñado ex profeso para reflejar el carácter y las vivencias de estos personajes, buscando que el huésped sienta que está en una casa única y personal, donde se comparten experiencias y recuerdos.
Las zonas comunes, como el lobby-biblioteca, invitan a descubrir un mundo acogedor, repleto de texturas, arte y referencias literarias. La colección de retratos de la artista Laura Cano y el mobiliario a medida refuerzan la sensación de estar en un hogar singular, abierto a la imaginación y al encuentro.
Gastronomía local con alma
El restaurante, inspirado en los guadarneses andaluces y en la figura de Anne Bloomfield—una de las amigas ficticias de Cristine—, apuesta por una propuesta gastronómica basada en el producto local. El chef malagueño Pablo Vega ha creado una carta que fusiona los sabores tradicionales de la provincia con toques contemporáneos, siempre respetando la autenticidad de los ingredientes y la cercanía al territorio.
Una integración real en la ciudad de Málaga
El compromiso con el entorno es una de las señas de identidad del proyecto. Cristina Lozano, fundadora de la marca, ha destacado que el mayor reto ha sido ser fiel a la historia del edificio y a la esencia de Málaga, sumando y aportando valor al tejido cultural, artístico y gastronómico de la ciudad. La vocación de Cristine Bedfor es la de convertirse en una casa abierta, en la que tanto huéspedes como visitantes locales se sientan acogidos y parte de una historia compartida.
Más que un hotel: una experiencia de hospitalidad emocional
Cristine Bedfor Málaga no es solo un hotel boutique; es una guest house pensada para detenerse, imaginar y habitar una historia personal en pleno centro histórico. La integración en el circuito cultural y de ocio de Málaga se fundamenta en la autenticidad, el cuidado del detalle y la colaboración con la comunidad local. En palabras de su fundadora, “Cada casa Cristine Bedfor es una ficción habitable. Málaga nos permite escribir un nuevo capítulo, con toda su luz, su historia y su magnetismo”.
Fotografias: Lorenzo Carnero