Cuando se recibe la invitación para una boda es lógico que la primera reacción sea la de alegrarse, a fin de cuentas la pareja que invita al enlace comparte un vínculo especial con uno mismo y esa es la razón por la que quiere compartir ese día tan especial con sólo unos cuantos.
Pero casi siempre nos pilla desprevenidos porque no sabemos qué regalar en una boda. También es cierto que ahora se ha puesto el listón muy alto en lo que a estilismos y regalos se refiere y que hay que estar al tanto de todas las novedades para no fallar ni en uno ni en otro menester.
La tarea de los novios tampoco resultará sencilla porque, además de tener que organizar todo hasta el último detalle, deberán pensar en un regalo especial para los asistentes. En esta ocasión nos hemos querido centrar en algunas de las ideas más originales y con mejor aceptación que han tenido y para ello nos ha bastado echar un vistazo a Internet, como ha ocurrido con la web Eventos Chic (eventoschic.eu). Toda una fuente de inspiración.
Cervezas artesanales. Es cierto que no hace tanto lo que más se estilaba era regalar un buen vino. De hecho, se había convertido en todo un símbolo y hay quien optaba por el vino de su tierra para reflejar sus orígenes. Pese a que esto es cierto, desde hace unos años la cerveza ha ido cobrando protagonismo y son muchos los que han visto en ella todo un mundo de opciones y han descubierto que las posibilidades son mucho mayores de las que estaban acostumbrados. En este caso, se trata de una cerveza artesanal, lo que ya le ofrece un toque único. Si se quiere personalizar más, se puede optar por comprar etiquetas para botellas y poner en ellas lo que se desee: el nombre de los contrayentes, la fecha del enlace, una frase que sea simbólica para ambos…
Chocolates. Es muy cierto el dicho popular que reza que ‘a nadie le amarga un dulce’ y con un regalo tan sencillo como una caja de chocolates se puede estar seguro de que se acertará con todos los invitados, incluidos los más pequeños. En este caso, el toque personal se puede dar añadiendo una pequeña nota en la que los novios les dediquen unas palabras de cariño y agradecimiento a quienes hayan asistido al enlace.
Velas. Este regalo es ideal para quienes se identifican con una determinada flor o fragancia porque pueden hacer el ‘2×1’. Al regalar una vela aromática se puede dar la simbología de que se inicia un nuevo camino y que se espera que éste esté iluminado y, además, se puede optar por el olor o la flor que se escogió para el enlace para que cuando los invitados la enciendan en su casa rememoren ese día.
CD recopilatorio. Los novios seguro que saben lo mucho que cuesta preparar los temas de música para la boda. Uno se pasa los días tratando de buscar las canciones más significativas para cada momento, sin olvidar la parte de la fiesta en la que se espera que todo el mundo baile y se divierta sin parar. Después de haber trabajado tanto, no es mala idea el compartir esas canciones con los invitados. Lo que se puede hacer es optar por una caratula personalizada. Como aún no se contarán con las fotos de la boda, hay que aprovechar para hacerse alguna que otra foto bonita los días antes para que ésta sea la protagonista de este regalo.
Macetas con mini plantas. A los matrimonios les pasa lo mismo que a las plantas, que sino se riegan y se cuidan, acaba por marchitarse con el tiempo. Ahora se ha puesto muy de moda que los novios quieran simbolizar esto en su boda y que animen a todos los asistentes a ‘cuidar de una planta’ Se puede optar por la que más guste porque hay muchas opciones en el mercado, incluso pequeños árboles si se desea. La idea es que, pasado un tiempo, los invitados les cuenten a los novios cómo les va con su planta y ellos hagan lo propio, pero con su relación.
Guantes. No es tan típico, pero tampoco lo son las bodas en invierno porque, por norma general, los novios buscan los meses en los que se espera tener mejor tiempo y, a poder ser, que no llueva. Pese a todo, hay parejas a las que les gusta hacer las cosas de forma diferente y optan por los meses de invierno para celebrar su enlace. Si es el caso, no es mala idea el optar por regalar guantes. Al igual que ocurría con el caso de los chocolates, bastará con añadir una pequeña nota o, cuanto menos, un identificativo a modo de cartel en el que se haga referencia al enlace.
Abanicos. Justo en el lado opuesto al del punto anterior, se encuentran los abanicos, que se pueden personalizar al máximo y optar por diferentes colores para aportar ese toque a la boda. Resulta un regalo de lo más económico y útil cuando el calor hace de las suyas.