En un jardín envuelto de magia y belleza, Vanessa y Javier sellaron su historia de amor en una celebración que unió la alegría colombiana con la elegancia española. La cita, diseñada con el sello inconfundible de la organizadora de bodas Sira Antequera, se convirtió en un encuentro donde cada detalle respiraba arte, sensibilidad y una fusión cultural única.

El arte de los detalles
La pareja soñaba con una velada sofisticada, acompañada de música en directo y un ambiente festivo. Sira Antequera supo interpretar ese deseo y lo transformó en un escenario lleno de armonía. Los arreglos florales brillaban con destellos de cristal, mientras la luz de las velas envolvía cada rincón en una atmósfera íntima y cálida. Todo parecía dispuesto para que la noche se viviera como un verdadero espectáculo.
Una celebración bajo las estrellas
Al caer la tarde, los invitados fueron recibidos con un cóctel elegante amenizado por música en vivo. La alegría se mezclaba con la emoción, invitando a bailar bajo el cielo estrellado. Vanessa deslumbró con un vestido bordado en cristales que realzaba su porte y su serenidad. Javier, fiel a sus raíces, la sorprendió acompañado de un grupo de mariachis al entonar “Sigo siendo el Rey”, un gesto que llenó de emoción a todos los presentes.
La gastronomía fue otro de los grandes protagonistas. Entre estaciones culinarias, los sabores de la cocina española brillaron en un cortijo cargado de historia, antaño propiedad de una estrella de Hollywood. Y como broche de oro, un buffet de postres convirtió el espacio en un auténtico jardín comestible: flores, mariposas, frutas y hasta un pequeño vergel de cítricos decorado con limones y mandarinas.
Magia y recuerdos para siempre
El flamenco, con su fuerza y su pasión, puso ritmo a la velada en una actuación que se grabó en la memoria de todos. La noche avanzó entre bailes, risas y emociones compartidas, hasta que, ya con las primeras luces del amanecer, la tradición española se hizo presente con un desayuno de chocolate con churros. Una despedida sencilla y cálida para cerrar una celebración que quedará en la memoria de Vanessa, Javier y cada uno de sus invitados como un canto al amor y la unión.
Fotos: Víctor Martí de El Marco Rojo y Víctor Alaez. Cedidas por Sira Antequera.