El 26 de julio Ricardo Marín presenta en Pihama, Fuengirola, su disco «Buenas intenciones”. El guitarrista, que se encuentra entre los más reclamados en nuestro país, ha acompañado sobre los escenarios a artistas como Manolo García, David Summers, Miguel Ríos, Chambao o Raimundo Amador entre otros.
Con motivo de su 20 aniversario en la música de manera profesional, porque toca desde pequeño, quiso hacer un concierto especial acompañado por las voces más destacadas del panorama musical como Ariel Rot, Miguel Ríos, Manolo García, Los Secretos, Nacho García Vega o David Summers. De aquello nació su primer álbum en solitario que presentará en Fuengirola junto a Lamari de Chambao, Javier Ojeda, Lin Cortés, el Zurdo, y en el que se estrena Esther Arroyo como cantante.
No, no te has equivocado. Ni yo tampoco. Estás leyendo la sección En Primera Persona. Y esta es mi forma de introducir a Eva Nilsen. ¿Por qué? Porque Eva es su pareja desde hace tres años, la productora de este álbum, y la que puso la máquina a funcionar para que no se quedase tan solo en un concierto de aniversario sino que marcase el comienzo de una carrera en solitario.
Podrían haber coincidido antes, y de hecho a lo mejor lo hicieron porque tienen muchos amigos en común, pero lo hicieron en un momento en el que gracias al talento de Ricardo y la motivación de Eva el disco pudo ser una realidad. En estos momentos trabajan en el segundo. Pero esa es otra historia. Mi objetivo era introduciros a Eva y que la conozcáis.
Hija de madrileño y noruega, que se conocieron en Torremolinos, allá por los 70, como en las películas de Esteso, Eva nació y se crío en Marbella, siempre en colegios internacionales. Aunque ha vivido en otros lugares del mundo como París, Londres o Madrid, hace unos años regresó a su hogar.
Comenzó siendo una niña, y tras los pasos de su madre, en el mundo de la fotografía. Se formó en arte dramático y maquillaje para cine, ha sido modelo, ayudante de dirección, directora de videoclips y tras la jubilación de su madre es la gerente de Casting Marbella. Una empresa que llegó a ser (cuando en España era fácil y barato rodar) un referente del sector a nivel internacional.
Eva ha ido picando de aquí y de allí, dejando que la vida la llevase por el mundo en el que se ha criado, el del artisteo. Desde pequeña ha visto a los grandes pasar por su casa. Y lo ha visto como algo natural, como a amigos que eran de su madre. Una mujer con mucho peso, ante la que a veces se ha sentido pequeña. Y es que no debe ser fácil vivir a la «sombra» de alguien así.
A sus 42 años Eva Nilsen está en su momento más tranquilo, más segura de sí misma. Sigue siendo guapa, muy guapa. Y sigue siendo tímida, muy tímida. Y siendo guapa y tímida cuenta en su curriculum con haber trabajado en los videos de Jamiroquei, Sting, o de ser la imagen de «La Flaca” de Jarabe de Palo.
Aparece en la entrevista casi con la cara lavada y vestida de una manera informal. No le intimidan las cámaras y cuando su objetivo la mira, se transforma. Es madre de un niño de 7 años, de una relación anterior. Sus padres se separaron cuando ella tenía 15. Todo esto a muy grandes rasgos resume lo que nos cuenta Eva en la entrevista que tenemos en el Meliá Don Pepe. Da la sensación de que lo he escrito todo de carrerilla, quizás porque ella habla así, muy rápido, aunque transmite tranquilidad.
Eva, ¿te criaste en Marbella?
Sí. Cuando mis padres se conocieron se vinieron a vivir a Marbella. Mi abuelo era el dueño de Cortijo Blanco y Pueblo Andaluz.
Cuando yo tenía 15 años se separaron, y por casualidad mi madre montó una agencia de casting, porque había muchos rodajes aquí y no había nadie que diese el servicio.
¿Eres hija única?
No, tengo un hermano 7 años más pequeño que es músico.
¿Cómo vives aquel momento en el que tus padres se separan y tu madre se pone a trabajar?
Yo estaba en clases de teatro, así que mi madre montase la agencia me vino muy bien. Además ella era fotógrafa y tenía un cuarto oscuro. Mis primeros trabajos son de cuando tenía unos 12 años o así y era hacerles fotografías un poco sugerentes a las madres de mis amigas.
¿Cómo se te ocurrió aquello?
Pues no me acuerdo muy bien, yo creo que me lo propusieron las madres porque sabían que yo hacía fotos. Y fue como empecé y a lo que he vuelto tras ser modelo, actriz, directora de casting, a las fotos y al vídeo.
¿Cuál ha sido tu vocación clara? ¿O la sigues buscando?
Creo que es verdad que no lo he tenido claro y la buscaba. Ahora puedo decir que es la fotografía y el vídeo. Es lo que mas me gusta, aunque sigo llevando la empresa de casting. Llevamos desde el 89.
Y mientras la encontrabas has probado diferentes cosas pero todo muy relacionado con el arte, con el cine, con la música…
En casa sí estaban más metidos en la música. Mi hermano es músico pero yo soy un desastre. Pero mi madre era la mejor amiga de Antonio Flores, escribía y componía en casa, ahí escribía casi todas sus canciones. Era el único sitio donde Lola le dejaba ir, porque mi madre era como una segunda madre y con ella estaba seguro. Cuando componía mi madre le grababa las canciones para que no se olvidara. Lo de estar rodeada de músicos lo he vivido desde pequeñita y ahora salgo con un músico.
Marbella, jovencita, modelo y rodeada de este mundo de artistas. ¿Cómo lo viviste?
Yo lo veo muy, muy natural. El mundo de Marbella de fiestas y en plan glamour nunca me ha gustado mucho, pero en mi casa siempre estaban artistas como George Benson, Tomatito, hicimos un videoclip con Paco de Lucía y Brian Adams. Es un lado de artisteo más que de glamour. Ahora mi hijo está viviendo un poco el mismo ambiente porque Ricardo, mi pareja, es guitarrista de Chambao y de Estopa pero ha sido de Rosario y de más gente. Y mi hijo entre eso, y que yo también he hecho videoclips para artistas desde que él es muy pequeño, se los conoce a todos.
Eva, me da la sensación de que has seguido un poco los pasos de tu madre, el camino que ella abrió.
En cierta manera sí, puede ser. Ahora ella se ha retirado a pintar, y lo único que quiere es pintar. Dice que las fotos las hago mejor yo.
¿Con qué edad empezaste como modelo?
Como a los 15 años empecé como modelo y actriz. Videoclips he hecho muchísimos. Uno de los primeros fue con «No me pises que llevo chanclas», la canción de Manuel Sánchez Sánchez. Y más recientemente he grabado cuatro videoclips con Pau Donés. De hecho como ahora cumple 50 años y con el tema del cáncer, ha hecho un videoclip con la gente importante de su vida y en la canción ‘Grita’ que es la que cierra el concierto, en el videoclip de ‘Agua’ también salgo como cantando con él.
En los videoclips mezclas un poco tu faceta de actriz y la de modelo, ¿Has hecho algo como actriz fuera de eso?
Sí. Con Zalman King que era un director americano, hicimos una serie bastante divertida, que vino a grabar aquí. Estuvo también grabando en Pekín y Luxemburgo. Ahí hice varios papeles, después he hecho papelitos pequeñitos en series. Zalman King murió hace unos años pero fue por ejemplo, el guionista de «Nueve semanas y media».
¿Pero te has propuesto realmente ser actriz alguna vez? ¿O era más bien ir haciendo cosas que te fueran divirtiendo?
Lo de ser actriz me gustaba mucho porque soy muy tímida y aquello me permitía ser otra persona. Pero sí que es verdad que igual no tengo la seguridad necesaria para ello, no he creído tanto en mí en ese sentido, soy más de observar y de estar detrás de la cámara. Pero de eso me he ido dando cuenta con el tiempo.
Me salían muchas cosas pero nunca me he sentido la modelo guapa. De hecho lo he pasado muy mal cuando parecía que me cogían por enchufe, porque mi madre tenía Casting Marbella. Y nunca era así, nosotros podemos presentar a diferentes personas a un casting, pero no tenemos la última decisión, al contrario, a mí me gustaba tener en la empresa a las chicas más guapas, no las miraba cómo una competencia. Supongo que nunca he tenido el ego lo suficientemente alto ni como actriz ni como modelo como para desarrollar esa competitividad de lucha en ese mundo.
Por lo que cuentas tu madre ha debido ser una mujer con mucha fuerza, muy interesante, y las hijas cuando tenemos madres así muchas veces nos venimos un poquito abajo a su lado. Por no estar a la altura o porque nosotros la vemos en una altura que a lo mejor creemos que nosotras no llegamos.
Sí, yo creo que has dado en él clavo, totalmente. Además ella tiene una personalidad mucho más fuerte o igual que la mía. A lo mejor lo mío era justo por compensar.
Por otro lado yo era la que tiraba de ella, la más responsable. Con la empresa y con el carácter, ella siempre ha sido más atrevida, más loca, con sus amigos, con las fiestas… Muchas veces era yo la que ponía los pies en la tierra, un poco la aguafiestas, me tocaba hacer de madre.
¿Y con tu padre qué relación había todos esos años a partir de la separación?
La relación con mi padre nunca fue demasiado buena. Era una persona muy inteligente, pintor, pero yo justamente, además, fui la que forcé esa separación. No trataba muy bien a mi madre y con 15 años dije: «o nos vamos o me voy», para sacarla de allí. Y eso ha estado presente siempre. Se murió el año pasado y ahí se ha quedado, sin resolver. Nos hablábamos, pero nunca fue una buena relación. Con mi hermano se llevaba mucho mejor. Él era también más pequeño cuando se separaron y lo tenía más idealizado.
Eva, ¿en qué momento entras de lleno en el mundo del videoclip?
He estado tanto delante como detrás y casi en la misma proporción. He aparecido en un video de ‘Sting’, con ‘Deacon Blue’, había también muchos grupos dirigidos a jovencitas que triunfaban en aquel entonces en Inglaterra tipo ‘Backstreet Boys’ que venían a grabar aquí. De esos he hecho muchísimos también. Y claro con quien más he hecho ha sido con ‘Jarabe de Palo’ que vamos por el quinto…También fui ayudante personal de Jamiroquai en el video ‘Love Foolosophy’.
Y no sé, he hecho tantos que cuando oigo música me imagino el videoclip.
Mi hermano es músico, como te he dicho, y ahora está en solitario pero tenía una banda que se llamaba ‘Loyal Enemy’. Yo en aquella época estaba con el padre de mi hijo, que no es mí pareja actual, que también es director de cine y director de fotografía y entre los dos, sin equipo ninguno, les hicimos los videoclips que además ganaron premios en varios festivales del sector.
O sea, que empezasteis con tu hermano…
Sí, y ahí me entró el gusanillo. Y después justo hace tres años, conocí a mí pareja actual, Ricardo Marín. Él ha sido guitarrista de muchísima gente, pero nunca se lanzó en solitario. Se nos ocurrió hacer un concierto para celebrar sus veinte años en la música profesional. Ricardo toca desde que tenía seis años.
En aquel momento, con el enamoramiento, le propuse llamar a todos los artistas con los que había tocado y todos empezaron a decir que sí. Pasamos de un concierto pequeñito que íbamos a hacer a de repente vernos en la Joy en una noche histórica. Así que decidimos grabar un disco y un directo en vídeo.
¿Cómo es trabajar con gente como Sting, por ejemplo?
Uy, yo lo pasé fatal. Él es encantador, pero lo pasé fatal porque estaba su mujer y yo creo que ella no sabía que yo hablaba inglés. Había una escena con unos barriles y salían mis piernas. Entonces, no sé por qué, se puso muy «chulita», me vería un poco como una amenaza. Yo era muy jovencita. Dijo algunas cosas sobre mí y me hizo sentir muy incómoda. Vamos, que yo ni me acercaba a él ni le hablaba si no estábamos juntos en la escena. Fue un rodaje de 16 o 17 horas. Empezamos en la madrugada y terminamos por la noche haciendo como un escena tipo Maverick, jugando a las cartas. Ahí se dio cuenta de que yo no suponía ningún tipo de amenaza y la cosa fue mucho mejor. Yo me mantenía muy, muy al margen, ni quería molestar ni nada. La verdad que es un señor de los pies a la cabeza.
¿Alguna vez te han pedido que hagas una escena un poco más subidita en algún videoclip o que hayas enseñado más?
Pues he conseguido que no. Incluso en una época salí en Man y en un anuncio para Carlsberg que además triunfó en Inglaterra. Hacíamos como de un grupo de chicas obreras y me agachaba y se veía un poco como la parte alta del trasero y triunfó. Me llevaron a Inglaterra para hacerme entrevistas y todo. Pero siempre he conseguido que no se me vea nada, incluso ni en los videoclips en escenas a lo mejor más subidas.
¿Cómo conociste a Ricardo?
En Starlite en una Noche de la Movida que organizaron. Es raro que no lo hubiese conocido antes porque ha sido guitarrista de Rosario, y los Flores son como mi familia. He estado en mil conciertos de ella, o sea que probablemente sí nos habíamos visto.
No sería el momento porque seguro que habíamos coincidido. Nos conocimos esa noche y empezó a mandarme mensajes. Tenía después un concierto en Madrid y cuando terminó vino a verme y ya prácticamente se quedó en Marbella.
Antes has dicho que tu madre era muy amiga de Antonio Flores y ahora que los Flores son como de tu familia. ¿Cómo vivisteis el palo tan seguido de las muertes de Lola y Antonio?
El día que se muere Lola, yo estaba de viaje en Bali y adelanté mi vuelta, volví justo ese día. Antonio estaba en mi casa en Marbella, porque Lola estaba muy malita. Se acababa de ir Antonio de mi casa cuando llegué yo. Mi madre no se fue con él porque había un casting muy grande. Entonces cuando llegué, que ella no sabía que volvía tan pronto, se fue a acompañarlo y yo me quedé al cargo del trabajo. Mi madre estuvo con él las dos semanas, viviendo con él en la cabaña, cuidándole. Teníamos otro casting también muy grande, así que se volvió. Y la primera noche que lo dejó solo fue cuando pasó aquello. Me llamaron a mí por teléfono. O sea, el día que se había venido mi madre, el primer día que dormía en casa. Para mí fue como si me pegaran un puñetazo, yo le tuve decir a mi madre que se había muerto Antonio.
¿Cómo reaccionó tu madre?
Fatal. Se volvió loca. Me quedé al frente de todo porque teníamos muchísimo trabajo. Yo no pude ir a su entierro, ni vivir su duelo. En aquella época tuve que estar mucho más fuerte, mi madre era su íntima amiga, tenían una relación muy cómplice. De hecho, creo que no lloré su muerte hasta años después que en un velero de Micronesia a Papúa Nueva Guinea, que me enseñaron a navegar mirando las estrellas, ahí sí que me puse su música y le lloré de verdad.
Lo de tener el apellido de tu madre es artístico, ¿no?
No, es oficial. Me los intercambié cuando nació mi hijo, con papeles y todo. Mi primer apellido era García, pero todo el mundo me conocía por Eva Nilsen y quise que mi hijo tuviese el apellido.
¿Cuantos videoclips has rodado con Ricardo?
Ya hemos grabado el cuarto pero el tercero y el cuarto todavía no han salido, y el tercero lo presentamos en la Sala Pihama el 26 de julio. Yo soy la directora de los videoclips. El que se va a presentar me hace mucha ilusión por la historia que tiene la canción.
Me la compuso el día de mi cumpleaños. Él no vino a la celebración, se quedó en casa, y cuando volví, un poco contenta, a las 4 de la mañana le dije que si quería tarta. Me miró como medio enfadado y me iba a acostar cuando me dijo que me había escrito una canción. Es muy bonita, va sobre la convivencia y las relaciones de pareja. Además cantan Lin Cortés y Lamari, que salen también en el vídeo. Sale gente muy especial en ese vídeo, mi madre, mi hijo, mucha gente cercana que tiene significado en mi vida.
El concierto del 26 va a ser también muy especial. Vienen Lamari, Lin Cortés, Javier Ojeda y debuta como cantante, tras su paso por «Tú cara me suena”; Esther Arroyo. Está muy nerviosa porque no se lo esperaba, pero canta muy bien, es una luchadora, es una mujer divina, y lo va a hacer muy bien.
Has vivido en muchos sitios y al final has vuelto a Marbella tú también…
Yo he vivido en Madrid en Londres y en más sitios, pero al final siempre he vuelto. Al estudiar en colegios internacionales, y vivir tanto tiempo fuera, no siento como otras personas que conozco esas raíces de que Marbella sea mi pueblo. Y supongo que me estaré perdiendo algo… Me siento de todas partes. Pero tengo un niño de 7 años y cuando me quedé embarazada, Madrid que es donde estaba en ese momento, me parecía demasiada ciudad, y me bajé para hacerme algo de Casting Marbella. En Madrid estaba de ayudante de dirección en cine, y tampoco es una profesión muy compatible con tener un hijo. Pasas mucho tiempo fuera de casa, a veces meses. Ahí es cuando decidí que volvía a mis fotos y mis vídeos.
¿Qué trabajos hiciste como ayudante de dirección?
Por ejemplo he trabajado con Chus Gutiérrez en ‘ El Calentito’, con Iciar Bollain en ‘Mataharis’ y he trabajado como ayudante personal de Tony Kaye de ‘American History X’.
De todos los sitios donde has vivido ¿dónde te ha sentido en un momento dado más identificada?
Pues mira, hay un sitio con una energía donde me sentía muy bien, aunque nunca he vivido allí; en el Albaicín, en Granada. Durante una época fui road manager de Estrella Morente, hace muchos años, y ellos tenían una casa enfrente de la Alhambra, y siempre que me quedaba allí a dormir me daba mucha paz. No me iría a vivir allí pero sí he sentido eso de estar muy a gusto.
¿Cómo te planteaste la separación de tu pareja, del padre de tu hijo, habiendo sido hija de padres separados? ¿Lo viste como algo más natural o te costó más por eso?
No influyó tanto en la decisión de romper como en que quería llevar bien con él. Como mis padres se habían llevado muy mal, tenía claro que nosotros nos teníamos que llevarnos bien, y de hecho nos llevamos súper bien, le adoro, es un tipo estupendo… Lo mejor es que nos llevamos bien todos, y eso es lo que yo quería, que hubiese armonía. Que mi hijo creciera sin roces ni malos rollos entre nosotros.
Eva, tu madre ahora se ha retirado y dices que solo quiere pintar. ¿Cómo has afrontado el relevo en Casting Marbella?
La empresa ahora es un poquito más pequeña. Tengo mis colaboradores que me ayudan, pero está muy centralizada en mí.
¿Sigue habiendo muchas producciones aquí en la costa, o con las últimas leyes que ha habido han huido a otros sitios ?
Cuando entró el euro ya se fueron muchos. Antes, con la peseta rodar en España era muy barato. Ahí hubo un bajón bastante considerable. Y luego con los impuestos que hay pagar, por ejemplo por tener figuración, yo creo que se ha llevado mucho fuera, a Sudáfrica y a muchos sitios. Lo que pasa es que nosotros también trabajamos no sólo para los productores de fuera, también para los de aquí. Ahora acabamos de hacer una peli de miedo, con realidad virtual que es con niños dirigida por Alexander Aja. De Casting Marbella han cogido a cinco niños y han hecho casting en Madrid, Barcelona y Londres. Estamos muy contentos.
En esta zona hay mucho talento, y más al haber gente tan variopinta de sitios tan distintos.
¿Qué crees que se podría hacer para que volviesen esas producciones internaciones a la Costa del Sol?
Pues primero dar más facilidades y bajar impuestos. En Marruecos ni siquiera hay, luego en Canarias tampoco. Creo que tendría mucho efecto porque tenemos un clima estupendo, con muchísimas horas de luz, al lado de toda Europa que tienen un invierno más duro, no tienen luz, hace frío, y aquí antes se rodaba muchísimo por eso.
Nos contaba María José González la semana pasada que es más complicado lidiar con los padres que quieren que sus hijos sean modelos que con los niños. ¿Te pasa a ti también a la hora de la selección?
Lo único bueno en mi caso es que yo no llevo solo modelos, entonces en muchos casos tienen otras virtudes, otros perfiles. Lo malo sí es cuando publicas en Facebook que necesitas un determinado perfil y te mandan algo que no tiene nada que ver. Por ejemplo, cuando buscas una mujer de 40 años y te mandan niñas de 20. Pero que sí, que hay muchas veces que los padres nos creemos que nuestros hijos son los más guapos del mundo. A mí con mi hijo me pasa también. Mi hijo es un crak. Es muy bueno. Me hace la vida muy feliz y muy fácil.
Pero, ya te digo, yo llevo muchos castings que no quieren modelos, también buscan actores, figuración… A mí me gusta mucho además cuando te piden para publicidad gente que tenga algo pero que no sea tan guapa. Te piden que transmita un carácter concreto, o que tengan arrugas, o que tengan una belleza más rara, alguien más especial. Con eso es con lo que más disfruto.
Eva, ¿qué te ha dado Ricardo además de una canción? Se te ilumina la cara cuando hablas de él.
No sé. Creo que nos compaginamos muy bien. El estar juntos nos ha dado fuerza para sacar este proyecto adelante, el de su carrera en solitario. Para el concierto que hicimos en Madrid ni teníamos sponsor ni nada, la gente participó por amor al arte. Yo creo que porque nosotros desprendíamos mucho amor y nos tiramos a la piscina sin saber ni casi cómo íbamos a pagar el vídeo después. Nos damos fuerzas el uno al otro.
Muchas veces lo hablamos. Yo nunca he sido muy arriesgada, mi madre sí era más atrevida, y sin embargo con aquel concierto me arriesgué. Y yo no sabía que tenía esa fuerza y al final lo haces y no pasa nada y al final te diviertes.
¿Qué proyectos tuyos tienes ahora?
Con Casting Marbella vamos a cambiar de oficina y queremos empezar fuerte en Ibiza y luego seguiremos con el siguiente disco de Ricardo. El primero lo sacó Sony, pero en este país cuesta mucho que apoyen a los artistas si no hacen reaggaeton. Parece que la buena música la han dejado como de lado. Van a lo fácil, y la gente la puede escuchar también, es darle cultura musical a la gente, pero bueno. Es difícil pero por ahí estamos, estoy apoyándolo, aunque eso en en realidad es suyo pero bueno, ahí estoy también. Yo hago mi videoclip y él hace su música.
Y por supuesto voy a seguir apostando mucho por la fotografía. Hace un año hicimos una exposición conjunta de mujeres, que se llama Beauty, y presenté una foto mía que es como ‘La última cena’ de 1×2 con mujeres como de los años sesenta, algo en plan mujeres desesperadas con rollo americano. La foto se hizo en el 2012 que decían que se iba a acabar el mundo, entonces por detrás sale un meteorito cruzando. Tuvo muy buena acogida. Me gustaría seguir en esa línea de fotografía artística y hacer una exposición con fotografías de gran formato. Los vídeos también me gustan mucho, los hago muy cinematográficos. En eso voy a seguir.
Buscamos nuestro camino, y mientras vivimos. Porque muchas veces en el camino en sí está nuestro aprendizaje. A veces en ese camino aparece un amor que nos potencia y los sueños de dos se hacen uno, y parece que así, juntos, es más fácil que se hagan realidad.
Redacción: Ana Porras Fotografía: Javier Nuñez y archivo personal de Eva Nilsen
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Transcripción de audio a texto realizada por Atexto.com.
ENHORABUENA Eva, guapïsima como siempre, bonita entrevista, suerte con todos vuestros proyectos, espero verte pronto ayer estuve 2 minutos con tu hermano, besos a tu mami, al peque ese hermoso que tienes y a tí.