Hace 10 años y un tiempo después del fallecimiento de su padre por leucemia, el entrenador de baloncesto Sergio Scariolo quiso ayudar a personas que estuviesen pasando por enfermedades oncológicos, y quiso centrarse en los niños y sus familias. Para ello se rodeó de una serie de personas junto a las que creó la Fundación Cesare Scariolo. El nombre de su padre, la persona que había inspirado aquella iniciativa, lleva diez años asociado a la labor de apoyo y ayuda que se presta desde esta entidad. Un aniversario digno de celebrarse.
El apoyo de la fundación Cesare Scariolo se materializa desde hace una década en el apoyo integral a aquellas familias que lo necesitan, ya sea mediante ayuda económica, mediante la cesión del piso de acogida que la fundación tiene en Málaga para el alojamiento mientras los niños reciben tratamiento, o con actividades lúdicas que les hagan olvidar que están sumidos en la enfermedad.
En este tiempo se han sumado a la causa colaboradores, voluntarios, patrocinadores y personas que mediante donaciones y eventos han contribuido a que esta labor pueda desarrollarse. Como forma de agradecimiento y de celebración de lo conseguido en este tiempo, desde la Fundación Cesare Scariolo se les invitó a un cóctel cena que se celebró en el hotel Gran Meliá Don Pepe.
Hasta el momento la Fundación desarrolla su labor en la provincia de Málaga.
Una de las bases de la Fundación es la transparencia. Por eso, aprovechando este aniversario han hecho balance en cifras de estos diez años. En ellos han conseguido recaudar un total de 500 mil euros entre eventos benéficos, donaciones, aportaciones de socios y subvenciones. De ellos el 98 % se han destinado al fin para la que se puso en marcha, y el 2% restante se ha destinado a gastos generados por la misma y necesarios para mantener su pequeña estructura. 200 familias han podido trasladarse a Málaga a los tratamientos de sus hijos en hospitales gracias a su estancia en el piso de acogida de la Fundación. 50 familias han recibido ayuda económica para tratamientos complementarios o necesidades básicas como transporte, y 150 se han beneficiado de las actividades lúdicas.
Las familias beneficiadas del trabajo de la Fundación se eligen gracias principalmente a la coordinación con las trabajadoras sociales del Materno Infantil.
Una fundación pequeña pero que presta una gran ayuda a las familias que lo necesitan.
Redacción: Ana Porras Fotografía: Amanda Watt
