Cuando hablamos de belleza, en lo primero que solemos pensar es en la piel del rostro, en la cara. Al fin y al cabo, es lo primero que vemos. Sin embargo, no es el único factor que determina nuestro aspecto y donde se manifiestan los signos de la edad. Es común encontrarnos con personas con un rostro cuidado, luminoso y terso pero que contrasta notablemente con la piel de estas otras zonas como el escote o las manos, que han olvidado o han dejado en un segundo plano.
Junto con el rostro, son las manos y el escote las zonas más expuestas a las agresiones externas y como consecuencia, las primeras en notar los signos del envejecimiento. Esto se debe a dos motivos. Por un lado, porque la piel de estas zonas es muy fina, por lo que es más difícil controlar su deshidratación, además posee pocas fibras colágenas y elásticas y por otra parte, no cuenta con suficiente melanina como para protegerse eficazmente de la radiación ultravioleta. Por su localización hace que tanto las manos como el escote reciban la radiación solar y otras agresiones externas la mayor parte del año.
Los signos de envejecimiento más frecuentes en las manos son las manchas, deshidratación o una piel extremadamente delgada y transparente. En el escote los más frecuentes son las manchas oscuras en la piel, las arrugas y sequedad o deshidratación, rojeces y capilares dilatados y la piel delgada.
Son zonas con características diferentes a las de la piel del rostro y existen muchos tratamientos que podemos utilizar según el problema con el que nos encontremos, aunque nosotros pensamos que lo ideal es combinar diferentes técnicas.
Para tratar el fotoenvejecimiento de estas zonas podemos utilizar distintos tratamientos medico-estéticos:
Contra las manchas podemos utilizar peelings, que nos ayudaran a renovar la piel dejándola más luminosa, uniforme y elástica. Tras una descamación controlada y limitada el resultado suele ser visible a los 7-10 días ofreciendo un color y textura más homogéneos. Se suelen recomendar hacer 3-4 peelings separados entre sí 21-30 días.
También podemos hacer un fotorrejuvenecimiento con nuestro láser de diodo Emerge que actúa bajo los principios de la fototermólisis fraccional. La entrega de la energía se produce en micro-columnas que coagulan la epidermis y la dermis sin dañar el tejido circundante, creando nuevo colágeno y elastina, que mejoran notablemente el aspecto de la piel, sin necesidad de baja. La recuperación de la piel es rápida y natural, es decir, el tejido se reconstruye gracias al nuevo colágeno y la elastina. Mejora también la apariencia general de la piel, mejorando las arrugas, aportando brillo y luminosidad a la piel. Para este tratamiento también se recomiendan varias sesiones según la zona y el fotodaño de la piel.
Contra la deshidratación, la infiltración de ácido hialurónico de baja concentración y vitaminas es una solución hidratante y antioxidante va fenomenal para la piel de escote y manos. Las mesoterapias de acido hialurónico, con un combinados de aminoácidos, péptidos y vitaminas nutre la piel en profundidad, alisa las arrugas y recupera la luminosidad.
En el caso de las manos, además de flacidez y arrugas, puede presentar una piel extremadamente fina que deja en evidencia tendones y venas. Cuando lo que tenemos es falta de colágeno y elastina sin ninguna duda los mejores resultados los tenemos con la hidroxiapatita cálcica por ejemplo Radiesse o la policaprolactona, como el Ellanse, dos revolucionarios tratamientos de rejuvenecimiento de manos de acción inmediata que combina una corrección duradera de las arrugas con la bioestimulación de colágeno. Estos tratamientos a veces son suficientes con una sola sesión. Se trata de un procedimiento rápido que no dura más de media hora y sus resultados se mantienen durante un año o más.
Y con cualquiera de estos tratamientos, y en cualquier zona, podemos asociar la Carboxiterapia, terapia que consiste en microinyecciones localizadas de anhídrido carbónico medicinal, que estimula la regeneración de los tejidos fisiológicamente, aumentando la cantidad de oxigeno de los tejidos, la elasticidad cutánea y rejuveneciendo la dermis y la epidermis. Si nos decidimos por este tratamiento debemos saber que se aplica en varias sesiones, normalmente una vez a la semana y siempre debe ser administrado por el médico. Nos encanta por su eficacia, y seguridad.
Con estos tratamientos podemos recuperar el escote y las manos con procesos seguros y eficaces. Aún así nunca debemos olvidar la importancia de tener una buena rutina de limpieza diaria, mantener la piel bien hidratada y una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, además de realizarnos algún tratamiento médico-estéticos especialmente indicado para estas zonas. En nuestra clínica siempre personalizamos los tratamientos tras una valoración de cada paciente, ya que no existe un tratamiento igual para todas, siempre trabajando con productos de calidad y con la ética y la profesionalidad como base.
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