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Maui: “A veces, la vida te habla y hay que echarle cuenta”

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Maui: “A veces, la vida te habla y hay que echarle cuenta”

Si hay algo que apasiona a Maui es vivir y disfrutar de cada minuto que la vida le regala acompañada de esa música que sale de su garganta y a la que reconoce como causante de su felicidad plena. Capaz de aprender de todo lo que la vida le pone por delante, esta joven utrerana está ligada al mundo de la música desde muy joven y hoy, se desnuda en su particular ‘Viaje Interior’ para seguir luchando por descubrir su verdadera misión no solo en la música, sino también en la vida. El  27 de febrero se sube a los escenarios malagueños con un único objetivo: conectar con las almas dispuestas a sentir.

 

Así es ella, una mujer valiente, guerrera, conocedora de sus raíces y de su historia; una mujer con un brillo especial en la mirada que la lleva a seguir caminando, construyendo historias y coleccionando sonrisas.

 Para quien no te conozca, ¿quién se esconde realmente tras MAUI?

Cuando Maui se baja del escenario aparece María Luisa, toda una señora de su casa, pensadora en exceso, amante de los libros, hacedora de buen potaje; la que va a clase de yoga para mantener el equilibrio, la que disfruta estando cerca de sus amigos, la del sofá y la mantita en compañía de Bach o Camarón.

Maui nace por mi excesiva timidez en los comienzos. Me daba vértigo ponerme al frente de un proyecto en el que me apuntaban todos los focos y, como buena aficionada al teatro, sabía que entrar en la piel de un personaje como Maui me ayudaría mucho a poder contar y cantar todas esas historias en primera persona, y así fue.

Maui tiene alas, se sube en sus tacones pero camina algo ridícula; Maui es valiente, soñadora, sin pelos en la lengua; es caótica y mágica… Todas llevamos una Maui dentro.

 

Cualquiera que se acerque a tu biografía va a encontrar como tus referentes en el mundo del arte a nombres de tanto peso en el flamenco como Fernanda y Bernarda de Utrera, José Fernández El Perrate, Pepa de Utrera ,Enrique Montoya, Raimundo Amador o Veneno pero, ¿quién ha sido tu verdadera guía?

Mi guía más permanente en el tiempo es mi padre, guitarrista, compositor y vividor por excelencia; todo un maestro que siempre me lleva de regreso a la raíz -a Utrera-, a todas esas vivencias que gracias a él me calaron de pequeña; al compás primitivo de mi pueblo; a esas reuniones flamencas en las que cantaba mi tio Bambino. Todos estos momentos son un tesoro que llevo grabado en mi disco duro.

¿En qué momento dijiste ‘mamá, quiero ser artista’?

Bueno, era muy pequeña cuando mi madre me colocaba unas moneditas en la cabeza y me animaba para que cantase en bodas, bautizos y otras celebraciones flamencas con mi padre acompañándome a la guitarra… ¡lo que es la vida! Hoy sigo poniéndome cosas en la cabeza; sigo siendo esa niña que hacía sonreír al personal.

En el año 2002 grabé mi primera maqueta y, a partir de ese momento, hice de mi vida mi profesión.

Tras un tiempo estudiando en el Conservatorio Elemental, finalmente llega tu oportunidad de marcharte a Granada a seguir estudiando en la Escuela de Magisterio y en el Conservatorio. ¿En qué momento decidiste que tu vida no estaba realmente en las aulas sino encima de un escenario?

Casi que no lo decidí. El escenario me arrastró cual imán, desde el principio. Ya en la universidad me llamaban muchos grupos y artistas para les hiciera coros y tocara el chelo en sus conciertos. Fue algo que fue pasando sin querer, no me di mucha cuenta… y, de repente, un día, ya no me podía bajar de las tablas. Me volví adicta a esa adrenalina tan maravillosa que supone conectar con tantas almas dispuestas a sentir.

«Sigo siendo esa niña que hacía sonreír al personal»

¿Cómo fueron tus comienzos en el mundo de la música?

Mis primeros pasitos fueron hace mucho, mucho tiempo. Como ya he comentado antes, podemos decir que empecé siendo una niña y de forma muy natural, en familia.

Cuando decido dedicarme profesionalmente a esto, me encontré con todo un camino de aprendizaje por delante que, a día de hoy, continúo mirando al horizonte.

Tengo recuerdos muy lindos de mis comienzos como Maui, muy bien rodeada y con una inspiración muy productiva y esa ingenuidad que te vuelve invencible; me recuerdo por las calles de Granada libreta en mano y llena de ilusión por cada verso que volcaba en ella.

Primero fue ‘El Puchero del Hortelano’ y después ‘Maui y los sirénidos’ ¿qué aprendizaje has sacado de ambas experiencias en grupo?

Con el Puchero aprendí muchísimo, viajé y me volví más desenvuelta. Con ellos pude experimentar con el violonchelo por bulerías, comencé a cantar…, en fin, ¡les debo tantas alegrías!.

Con mis Sirénidos pude plasmar mis primeras historias, hacerlas realidad… fue una época maravillosa. Ellos me enseñaron mucha música, pude empaparme de estilos que no conocía como el jazz y, sobre todo, disfruté creando mis primeros guiones para llevar las canciones a escena.

 

En el año 2013 decides dar el salto y lanzarte a la aventura de caminar en solitario, ¿por qué en ese momento y no desde un principio?

 Supongo que lo hice cuando estaba preparada para ello. Yo estaba felíz en Granada con mis Sirénidos, y Madrid me daba un poco de miedo. Y un día, así de repente, me lancé a probar esa aventura. Hice la maleta y no lo pensé demasiado. Me planté en Malasaña. A veces, la vida te habla y hay que echarle cuenta.

¿Qué es esa evolución evolutiva de la que hablas?

Pues con esto me refiero tanto a mi ‘misión’ musical como vital. Hablo de esa pasión adelante que, como mujer gitana sobre la que hay una tradición, me he atrevido a dar. Hablo de esa búsqueda como ser libre, independiente, que trabaja por mejorar lo que mis antepasados me dejaron; del derecho a ser yo misma en un mundo bastante afectado por lo rancio, por lo apolillado. Las cosas no son fáciles pero es necesario aportar tu granito de arena para que generaciones venideras se vuelvan más fuertes.

Yo hago canciones y, para escribir historias, hay que vivir con todas sus consecuencias. Experimentar con el compás me divierte; y huyo del miedo y de los prejuicios para poder avanzar.

«Huyo del miedo y de los prejuicios para poder avanzar»

De esa experiencia en solitario nació ‘Viaje Interior’, tu primer disco en solitario y grabado en Madrid en 2014, bajo la batuta de Diego Guerrero y con colaboraciones tan destacadas como la de Martirio. ¿A qué MAUI vamos a encontrar?

‘Viaje Interior’ es un paseo por mis adentros, ni más ni menos; un recorrido por paisajes de mi vida con los que el oyente se identifica totalmente porque cuento historias cotidianas, sencillas, pero pasadas por el universo Maui.

Madrid está sacando otras Mauis de mi interior que desconocía. Yo lo llamo el efecto matriuska. Solo puedes conocerte mejor si te arriesgas, y eso es lo que he intentado con este disco de sonoridades muy diferentes a los anteriores. Es un disco mucho más desnudo con el que envuelvo historias que pretenden remover las emociones.

¿Por qué un proyecto de micromecenazgo para lanzarlo?

Necesitaba conocer a mi público, entrar en contacto directo con la gente que sigue mis pasitos y, de este modo, pude hacerlo con la sorpresa de encontrar un apoyo maravilloso.

Después entró en juego la discográfica Nuevos Medios. Ellos editaron ‘Viaje Interior’ y lo lanzaron a las tiendas.

» Solo puedes conocerte mejor si te arriesgas»

¿Hacia dónde nos va a llevar ese ‘viaje interior’?

Probablemente te lleve de la risa a la lagrimita, pasando por otros estados de ánimo que están ahí, dentro de ti, pero que siempre la música te ayudará a encontrarlos; tesoros escondidos que espero y deseo que sirvan a todos los que lo escuchen.

 

Llevas en el mundo de la música desde muy joven, ¿qué has tenido que sacrificar para llegar hasta aquí?

¡Pregunta complicada! Cuando sacrificas algo es en pro de otra cosa y, tal vez, esa otra cosa te aporte una alegría insustituible; de tal modo que no sientes que hayas sacrificado nada. Más bien has elegido un camino; y creo que ése es mi caso.

Renuncias a la estabilidad y a otras cosas propias de la zona de confort a la que se aferra el ser humano; te acostumbras a caminar por el alambre. Eso resulta emocionante aunque, a veces también duela. Una se cae y se levanta y un día amanece y entonces resulta que eres más fuerte. Si pudiera volver atrás no cambiaría nada.

¿Cómo ves el mundo de la música en estos momentos? ¿Qué crees que le sobra y que le falta en los tiempos que corren?

 Lo veo delicado. Por un lado, veo que el talento florece cuando las cosas se ponen difíciles; hay mucha gente creativa haciendo cosas maravillosas. Soy testigo de ese buen hacer en esas noches de bohemia madrileña -como yo las llamo-, cuando una guitarra pasa de mano en mano y comienzan a volar canciones por el ambiente. Hay gente haciendo cosas verdaderamente buenas.

Pero, por otro lado -el lado oscuro-, la industria sigue con su afán por acaparar un mercado obsoleto al que han acostumbrado a las ‘orejas’ de este país; y la cosa se pone fea respecto a las oportunidades que ofrecen a esos artistas invisibles para la gran masa pero que están llenos de talento y de maravillas por ofrecer.

Yo creo en la gente; no subestimo al público. Creo que son inteligentes y que, cada vez más, se dan cuenta de todo lo que hay montado en torno a la música. Creo que, entonces, se dedican a investigar un poco y a buscar calidad.

«Una se cae y se levanta y un día amanece y entonces resulta que eres más fuerte»

¿Qué le queda por hacer a MAUI como profesional de la música?

Muchas cosas….muchas canciones.

¿Qué queda hoy de esa niña utrerana que un día decidió dejar sus raíces para cumplir su sueño?

¡Mucho! Sigo jugando cada día y conservo la capacidad de soñar sin miedo; sigo odiando las aceitunas (sonríe) y he conseguido volar cerca de aquellos dragones dorados que tanto me gustaban…

Para terminar, ¿qué le pides a la vida?

Que me abrace fuerte y me haga cosquillas. Soy coleccionista de risas, me gustan grandes, sonoras, de las que te sacan la lagrima; me gustan compartidas, me gusta provocarlas, me gustan a diario; una vida sin risas es como una tortilla de patatas sin patatas.

Próximos conciertos:

27 Febrero- Málaga, La Cochera Cabaret

5 Marzo- San Sebastian- Covert Garden

6 Abril- Chiclana-Teatro Moderno

2 Mayo-Murcia- Teatro Romea

9 Julio-Utrera-Teatro enrique de la Cuadra.

12 Mayo- Madrid- Fiestas de San Isidro

Redacción: Rocío Alcántara

 

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