La Sala Moreno Villa nos trae la exposición «Encuentro» que refleja literalmente como se han encontrado los discípulos de la escuela Randoninana de Málaga y cuatro escuelas de Bellas Artes de Xiangtan en China. La muestra, que puede visitarse hasta el 27 de marzo, es fruto de las inquietudes y trabajo artístico de todos los participantes.
La concejala de Cultura, Noelia Losada; la edil del Distrito Centro, Gemma del Corral, y Jorge Rando, inauguraron esta muestra que supone el resultado de la colaboración entre el Museum Jorge Rando, las escuelas de Xiangtan, la Obra Social La Caixa y el Área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga. Esta conexión se ha creado con el fin de explorar y promover junto con las entidades chinas, el nuevo expresionismo del maestro Jorge Rando dando lugar a través del arte a un diálogo entre Oriente y Occidente.
La escuela Randoniana nació en 2014 en el Museum Jorge Rando para estudiar el Nuevo Expresionismo de su artista homónimo y apelar que se trata de un arte que tiene una profunda convicción humanística. Hoy, los alumnos de esta escuela junto con los de Bellas Artes de Xiangtan, que tienen entre 5 y 12 años, conforman esta exposición que se compone de 14 óleos y 31 acuarelas.
La directora del Museum Jorge Rando, Vanessa Díez, afirmó en la presentación de la exposición que se trata “es un recorrido por paisajes de mar, de olor a ramas quemadas y árboles que se desvanecen, de las lágrimas del deshielo, de los colores retenidos de un Amazonas en llamas o ballenas y animales a los que quizá nunca lleguen a conocer. Una concienciación pictórica de la naturaleza a través de su poder de creación y destrucción».
Añadió que «es una exposición de niños, pero sus obras se alejan del concepto de dibujo infantil, desde la Escuela se rompe con la pedagogía plástica al uso, para que inicien la búsqueda de un lenguaje contemporáneo y libre basado en la espiritualidad y el humanismo. Al contemplarlas, el visitante se puede adentrar en obras que destilan inteligencia, que extrapolan la experiencia emocional y la capacidad expresiva de los niños a través de técnicas sencillas. En palabras de Jorge Rando «la divina sencillez»”.
