La Sala Joaquín Eléjar del Colectivo Cultural Maynake, en la calle Juan Bosco de Málaga, acogerá los próximos 27 y 28 de mayo y 3 y 4 de junio la representación de la obra teatral «Úrsula, de José Arcadio” cuyas entradas, al precio de 7 euros en venta anticipada, se pueden adquirir en la web mientrada.net.
Esta obra, en escena desde hace más de un año de la mano de La Tarumba Producciones, está escrita e interpretada por Elena Hernández «La Canarita”, una profesora que compagina su labor docente en el en el I.E.S JARIFA de Cártama con su pasión por la interpretación. Hoy hablamos con ella para conocer su historia y descubrir su amor por el teatro.
¿Qué llegó antes a tu vida la Pedagogía o la Interpretación?
La Interpretación, aunque a veces, muy de niña, y muy esporádicamente, enseñaba a leer a una conocida. Pero las imitaciones, los juegos de personajes, han sido desde muy niña e ininterrumpidos, aún lo hago.
En tu trayectoria teatral has interpretado a personajes femeninos muy diversos pero todos con una gran fuerza escénica. ¿Con cuál disfrutaste más a la hora de interpretarlo?
Disfruto muchísimo con Úrsula, pero también con Adela de La casa de Bernarda Alba o con Flora, de Veintisiete vagones de algodón, de Tennessee Williams, con Carmela, de ¡Ay, Carmela!, muy bonita esta mujer.
¿Cómo surge la idea de escribir la obra «Úrsula, de José Arcadio”?
Úrsula surge porque la vida me pone ante la tesitura de hacer eso que venía pensando desde hace tiempo: mi propio montaje, pero que reprimía porque no me consideraba- ni me considero- directora. Ahora, me doy cuenta de que sigo sin serlo, simplemente soy una actriz que sabe trabajar consigo misma.
Momento de la representación
¿Cómo es tu Úrsula y cómo consigues que el público se identifique con ella?
Es una mujer auténtica, que disfruta de lo cotidiano sin remilgos, no almibarada, sí disfrutona, algo áspera pero también tierna. Es también muy humana, ha cometido errores, y ha soportado cosas que… En fin. Es que por más que diga da igual, cuánta gente hay así, y todos, sin embargo, son diferentes. Es su forma de respirar, de mirar, de sentir.
Úrsula salió directamente de mis entrañas, no de mi corazón, sino de mis entrañas, algo profundo, muy muy de dentro y por eso llega, creo que es por eso.
En la presentación de la obra se invita al espectador a disfrutar de lo cotidiano, a sentirse libre y a amar sin miedo a los límites. ¿Nos iría mucho mejor si siguiéramos estos consejos?
Ya te digo, «sentirse libre” es sentirse, es decir, sintiendo qué daño vamos a hacer, y ¡qué bien nos iría!, porque para cambiar una actitud antes hay que cambiar una emoción. Eso es lo que el Teatro puede conseguir: llevarnos esa emoción para casa, y poco a poco, transformarnos para transformar.
También hablas en tu obra de la importancia de ir por la vida con intención y de aprender a quererse.
Sí, ir con un objetivo, no perder el tiempo ni dejarse engatusar, ir para algo. Aprovechar el tiempo.
Y lo de quererse «hay que querer quererse”, porque cuántas veces no hemos de ceder, de seguir poniendo empeño, de «venga, vale”, que lo dice una pa una misma, y ellos también lo hacen, esos nuevos hombres con nuevas palabras. Si nos gusta la persona,si nos enamora, hay que querer quererse.
En este proyecto te acompañan María Marcos como estilista, Lola Villarrubia como diseñadora gráfica, Rubén Arriolabengoa Unzueta en Luminotecnia y Sonido, y Paco Santos como productor. ¿Cómo está siendo esta experiencia junto a ellos?
Son creativos: María Marcos es estilista de cine, te escucha, te entiende, y siempre te da opciones. «No pasa nada”, es su frase, da igual que saque veinte mil faldas, vestidos, blusas, y tú le digas » es que no, María, no es esto”, da igual, ella levanta los brazos, sonríe, y se va a coger otra cosa, mientras dice que «no pasa nada”.
Rubén tenía clarísimo los juegos de luces, una vez yo le dije lo que quería transmitir, sabe matizar, y sabe solucionar problemas y adaptarse a lo que cada sala tenga, y eso es un mérito.
Y Lola es además, fotógrafa: todas las fotos de la obra son suyas. Cuando la gente ve el cartel me preguntan si tengo photoshop, y para nada, es Lola, que sabe dónde está la luz, ¡se vuelve loca haciendo fotos!empieza a disparar y es una gozada verla en acción.
Todas las fotos de la obra que hay por ahora, se hicieron en dos horas, el mismo día.
Momento de la representación
En tu obra juega un papel muy importante la música de Carmen García Jara.
Fundamental. Tenía muy claro cómo quería la música, que tiene una base musical muy clara, la obra se gestó con un autor determinado. Carmen, sin ver la obra, solo con leerla y escucharme, captó lo que yo quería de una forma sorprendente, y lo que ella ha compuesto es para mí Úrsula tanto como el texto.
¿Es difícil hacer teatro hoy en día?
Sí, ¿y hacer una revista digital?, ¿ y emprender un negocio de ropa?, ¿y ser cantante?
Pero en lo que concierne a la pregunta lo que jode es que no nos demos cuenta de que el arte, cualquier tipo de arte es necesario, imprescindible para la sociedad, pero más actualmente. Si no soñamos, si no nos elevamos, seremos autómatas, mediocres , banales. El teatro además es artesanal: tú ves al actor, tú ves la masa, lo palpas, y sientes, sientes, entiendes al asesino, entiendes al vengativo, y cosas peores… Nos acerca. Y eso nos lo podemos llevar a casa y seguir comprendiendo para poder progresar, cambiar, abrirnos. Y los políticos, son poco «políticos”, poco «ciudadanos”, que es lo que significaba en su étimo griego. El teatro es un bien común, no minoritario, está al servicio de todos, es didáctico, es decir, tiene una utilidad social. ¿Cómo es posible que nos lo pongan tan difícil a los cómicos?
¿Tienes algún nuevo proyecto teatral en mente?
Sí, claro. Uno en el que me quiero morir de la risa.
Los próximos 27 y 28 de mayo y 3 y 4 de junio La Sala Joaquín Eléjar del Colectivo Cultural Maynake acogerá la representación de la obra teatral «Úrsula, de José Arcadio”. Las entradas se pueden adquirir en la web mientrada.net.
Redacción: Esther Lara y Ana Porras
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