Las calles se han vuelto a llenar de vida durante este fin de semana. Estos cincuenta días de encierro y la responsabilidad que hemos demostrado –destacando, la labor de cuerpos de seguridad y sanitarios– se ha visto ahora recompensada en cierta forma, aunque en esas salidas a la calle nos acompañe la incertidumbre, porque el virus sigue ahí.
Son muchos los que han decidido desempolvar las zapatillas deportivas y salir a hacer deporte, tanto a pie como sobre la bici o los patines. Cabe recordar que las personas que deseen hacer deporte pero no sean profesionales deben hacerlo de manera individual y sin salir de su municipio. Por otro lado, han sido muchas las familias que han podido disfrutar de un paseo juntos. En este caso, las medidas son claras: se debe realizar en un radio máximo de un kilómetro y máximo de dos en dos.
Los horarios en los que podemos salir y los grupos de la población que pueden hacerlo en cada momento, hay que respetarlos. Aunque ya se ha pedido desde la Junta de Andalucía que se flexibilicen los horarios de salida de los niños para que no coincidan con las horas en las que hace más calor en nuestra comunidad. Como con todo en esta crisis, seguro que próximamente se harán cambios a este respecto.
Así ha vivido Málaga el primer fin de semana en la que la salida se ha permitido; una crónica en imágenes que no hubiera sido posible sin el trabajado del fotógrafo Lorenzo Carnero.
En las playas y los paseos marítimos por fin se puede disfrutar del buen tiempo
El puerto de Málaga y la Farola han sido testigos de este momento que quedará en la memoria de muchos
La calle más emblemática de Málaga también ha recibido visitas
Sin embargo, esta jornada también ha dejado algunas imágenes más negativas. Aunque no ha sido la norma general, en algunos momentos y lugares se han dado grandes aglomeraciones de personas donde no ha sido posible respetar el distanciamiento necesario de seguridad. Es necesario que todos tomemos consciencia de que el virus sigue entre nosotros y, aunque podamos salir a la calle, hay que seguir extremando precauciones en todo momento.
Para algunos, este principio de desconfinamiento llega demasiado pronto, para otros, hace días que se debería haber permitido la salida para hacer deporte y dar paseos. Lo que está claro es que no siempre llueve a gusto de todos y, sea como sea, las calles de Málaga se han llenado de personas con ganas de volver a disfrutar de su ciudad y de que la “nueva normalidad” llegue cuanto antes.
Fotografía: Lorenzo Carnero
